Si pensabas que poner un fusil en un perro robótico no era una buena idea, ¿qué tal uno con un lanzallamas real en la espalda?
Y no, no es solo un concepto loco. Ahora existe como creación de Throwflame, el fabricante de lanzallamas más antiguo de los EE.UU.
La compañía con sede en Cleveland, Ohio, ha sido conocida durante algún tiempo por ofrecer una colección de este tipo de objetos. A su extravagante línea, ahora agregado el Thermonator, que combina un perro robótico cuadrúpedo con su lanzallamas ARC modular y eléctrico que quema gasolina o una mezcla de gasolina y diésel, lo que permite que el robot dispare un chorro de llamas a unos 10 metros de distancia durante 30 segundos.
La mitad robótica de este siervo del mismísimo averno no se ha identificado formalmente, pero parece ser un Unitree GO1 construido por Unitree Robotics. Este tiene cuatro patas con 12 grados de libertad, lo que le permite caminar, correr, subir escaleras, evitar obstáculos, manejar terrenos accidentados, sentarse y acostarse. También dispone de inteligencia artificial para la navegación y para el rastreo o seguimiento de seres humanos.
Hay una razón por la cual Throwflame no optó por el robot Spot más grande y posiblemente más capaz, construido por Boston Dynamics. Si bien la mayoría de los roboperros justificadamente suscitan preocupaciones de vigilancia por su presunto papel futuro de supervisión de la población, Boston Dynamics prohíbe estrictamente el uso manifiesto de sus robots como armas. Además, a unos 70.000 dólares cada uno, los Spots son extremadamente caros. El Go1, por otro lado, cuesta entre 2.700 y 3.500 comparativamente míseros dólares, y un lanzallamas ARC costará entre 699 y 899 adicionales.
Y si bien no está claro cuál será el precio final del Thermonator —sumando las cifras anteriores tal vez nos demos una idea—, la compañía abrió una lista de espera (AQUÍ) y dice que comenzará a enviarlos en el tercer trimestre de este año.
Pero además de verse aterrador y genial a la vez. ¿Para qué puede servir algo así? Bueno, el Thermonator puede utilizarse para destruir malas hierbas, quemar rastrojos de cultivos, quemas controladas en la gestión forestal y otras tareas que pueden ser desagradables —si no directamente peligrosas—, por lo que darle el trabajo a un robot tendría sus ventajas.
Eso claro, si cae en manos responsables…
Fuente: Throwflame. Edición: MP.
A alguien se le ocurrió montar lanzallamas en perros robots y venderlos