Aina Vidal, diputada por Barcelona, y portavoz del partido político Movimiento Sumar en el Congreso de los Diputados, propuso públicamente que el aborto sea incluido en la Constitución para seguir el reciente ejemplo de Francia que se convirtió en el primer país del mundo en incluir este supuesto “derecho” en la Carta Magna.
En el marco del “Día Internacional de la Mujer”, la funcionaria declaró: “Estos días vamos a volver a llenar las calles, un día con clase y de clase. Un día que es importante y que, por lo tanto, queremos aprovechar para abrir un debate social que nos parece fundamental”, explicó Vidal admirando la reciente decisión del Parlamento francés de avalar el asesinato de seres humanos en el vientre materno.
Ante las declaraciones de la ministra de Igualdad, Ana Redondo, quien ha descartado esa reforma en España debido a que todavía “no se dan las condiciones” y requiere de “enormes consensos y mayorías”, la portavoz de Sumar la exhortó a que cambie de opinión “esto tiene que ver con el derecho a la vida” (sic), sentenció. Y agregó: “Esto no es un debate de partido, esto es un debate de país y de sociedad; creemos que todas las mujeres, de cualquier color político, debemos participar del mismo”.
Para incluir la eufemísticamente llamada “Interrupción Voluntaria del Embarazo” en la Constitución Española esta necesita una reforma con el acuerdo de “una mayoría de dos tercios, disolver las cámaras y que el pueblo español lo ratifique en un referéndum”, diferente a Francia donde se necesitó el apoyo de tres quintas partes de los legisladores y no era necesaria una consulta popular, explicó Redondo.
“Este 8 de marzo saldremos a gritar que se acabó, pues las mujeres de hoy y del mañana queremos ya la interrupción del embarazo en la Constitución. Lancemos un mensaje al mundo como país, como sociedad. Lancemos un mensaje a todas las mujeres, porque nuestras vidas importan, porque no estamos solas y porque nos queremos vivas”, concluyó Vidal.
Cabe siempre recordar que este programa antinatalista, diseñado y dirigido desde las élites globales, desde ONG’s e instituciones internacionales, como International Planned Parenthood, Open Society o Amnesty Internacional, a las que adhieren los gobiernos sin pensar en sus consecuencias morales, espirituales y materiales de una nación, y de su pueblo. El aborto fue, es, y será una práctica antihumanista y anticristiana.
España: proponen reformar la Constitución para agregar el supuesto “derecho” al aborto