Nada consigue frenar el avance de las marcas de coches chinas en Europa.

Según informa Bloomberg, las marcas chinas acapararon el 11% del mercado europeo de coches eléctricos en junio, registrando un récord de matriculaciones. Sin embargo, hay que tener en cuenta que estos datos son sin la aplicación de los aranceles adicionales que entraron en vigor a principios de julio.

Las marcas chinas matricularon más de 23.000 vehículos eléctricos de batería en toda la región durante junio, la cifra más alta de la historia, según las cifras de Dataforce. Su aumento secuencial del 72% respecto a mayo duplicó el aumento global de matriculaciones de coches eléctricos en Europa en junio.

Para saber si este crecimiento es momentáneo o es algo que va a perdurar, a pesar de las sanciones económicas, debemos estar muy atentos a sus ventas en los próximos meses. Entre todas las marcas destacan SAIC y BYD.

En concreto, los aranceles provisionales de la UE imponen a SAIC una carga adicional del 38%, mientras que BYD pagará un 17% más sobre el arancel aduanero existente del 10%.

Aunque la empresa estatal SAIC fue la responsable del mayor aumento de las importaciones de la marca china, alrededor del 40% de los MG4 matriculados en junio fueron automatriculaciones de concesionarios, «un crecimiento no muy saludable», según Gabriel Juhas, jefe de producto de Dataforce.

Por otro lado, las ventas de BYD sí que están creciendo. Según Julian Litzinger, analista de Dataforce, una campaña de marketing centrada en la Eurocopa celebrada en Alemania ha conseguido atraer a los consumidores.

Otro factor que impulsó el mercado europeo del coche eléctrico en junio fue la introducción de incentivos en Italia, que contribuyeron a duplicar las ventas de vehículos eléctricos de batería en el país con respecto a hace un año.

Unos 200 millones de euros en subvenciones para nuevos eléctricos se agotaron en menos de nueve horas, según informó el Gobierno en un comunicado. Alrededor del 60% fue aprovechado por las familias y el resto por las empresas.

Este aumento ha situado a Italia, que se había quedado rezagada en ventas de vehículos eléctricos, entre los seis primeros puestos de un mercado regional que incluye Estados miembros de la UE, países como Noruega y Suiza, que participan en su mercado único, y el Reino Unido.

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