El CEO de OpenAI ha identificado cinco niveles de inteligencia artificial y destacó que estamos en la transición del segundo al tercero, donde la IA es capaz de actuar de manera autónoma.
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En el Día de los Mercados de Capital de T-Mobile 2024, una conversación entre el CEO Mike Sievert y Sam Altman de OpenAI ofreció una visión reveladora del paisaje en evolución de la IA y las estrategias que están moldeando su futuro.
Altman, quien lidera uno de los laboratorios de investigación en IA más influyentes del mundo, compartió su visión sobre cómo la IA podría transformar industrias y acelerar el progreso humano. Hace dos semanas, su empresa presentó la familia de modelos de razonamiento O1, que representa un avance significativo en comparación con la serie GPT, que solo sobresale por su capacidad de generar texto similar al humano y tareas sencillas.
«Sabíamos que lo que realmente queríamos eran sistemas que pudieran razonar», explicó el CEO de OpenAI, describiendo O1 como la «etapa GPT-2» de un nuevo paradigma de IA.
El cambio de modelos de lenguaje a sistemas de razonamiento marca un momento crucial en el desarrollo de la IA. En relación a esto, Altman delineó una progresión de cinco niveles de capacidades:
Nivel 1: Chatbots (IA con capacidad de conversación).
Nivel 2: Razonadores (resolución de problemas a nivel humano).
Nivel 3: Agentes autónomos (sistemas que pueden tomar acciones).
Nivel 4: Innovadores (IA que puede ayudar en la invención).
Nivel 5: Organizadores (IA que puede realizar el trabajo de una organización).
La transición del nivel uno al dos tomó tiempo, pero Altman destacó con entusiasmo que el nivel dos servirá como un trampolín para alcanzar rápidamente el nivel tres: agentes de IA capaces de tomar decisiones autónomas y ejecutar tareas complejas.
Las aplicaciones potenciales de estos sistemas avanzados son vastas y variadas. Por ejemplo, T-Mobile se está asociando con OpenAI para desarrollar IntentCX, un modelo impulsado por IA que busca revolucionar el soporte al entender y anticipar profundamente las necesidades de los clientes. Esta colaboración ejemplifica cómo esta tecnología podría transformar procesos empresariales enteros, no solo mejorar los existentes.
¿IA como motor social y económico?
Más allá de las telecomunicaciones, Altman vislumbra a la IA como un catalizador para avances en la salud y la educación. Prevé que los asesores médicos de IA democratizarán el acceso a atención médica de calidad a nivel global y que tutores de IA personalizados revolucionarán la educación.
Por último, y quizás lo más intrigante, el empresario insinuó el potencial de esta tecnología para acelerar el descubrimiento científico.
«Si la IA puede ayudarnos a inventar cosas nuevas, curar enfermedades, encontrar mejores fuentes de energía… sería un gran logro», concluyó, posicionando a la IA como un motor clave para el crecimiento económico sostenible y el progreso social.
Por MysteryPlanet.com.ar.
Los agentes de IA autónomos están a la vuelta de la esquina, afirma Sam Altman