El nuevo Gobierno de la región belga de Flandes, formado por los nacionalistas flamencos de la N-VA, los cristianodemócratas (CD&V) y los socialistas (Vooruit), tiene previsto prohibir a los padres migrantes que no hablen neerlandés y se nieguen a aprenderlo el acceso a becas escolares para sus hijos, según informa el medio flamenco VRT news.
La educación será una prioridad de ese nuevo Ejecutivo, que ha anunciado que aumentará el presupuesto destinado a educación en 500 millones de euros anuales con el objetivo, sobre todo, de mejorar la calidad de la enseñanza.
En ese contexto, el conocimiento del neerlandés será fundamental, y los padres que no lo hablen y se nieguen a aprenderlo perderán las becas escolares de sus hijos. Flandes tiene además previsto aumentar los requisitos de nivel de idioma para los recién llegados, según este mismo medio.
Otra de las novedades será la introducción de objetivos mínimos de idiomas para los niños de preescolar. En la educación primaria, la mitad del tiempo lectivo se dedicará a las matemáticas y al neerlandés.
La nueva administración flamenca se ha propuesto asimismo hacer más atractivo el trabajo de profesor, un problema recurrente en el país, y con ese fin tiene previsto destinar un presupuesto adicional para la formación de maestros, así como recursos destinados a mejorar su competencia y la calidad de la enseñanza.
En la madrugada del pasado sábado, los tres partidos que formarán el futuro ejecutivo en Flandes llegaron a un acuerdo tras meses de negociaciones desde las elecciones en Bélgica el pasado junio. Las tres formaciones definieron un programa de gobierno para los próximos cinco años.
Los inmigrantes que no hablen neerlandés no tendrán acceso a las becas escolares en Flandes