El CERN, la Organización Europea para la Investigación Nuclear, está involucrado en un programa nuclear secreto y debajo de sus instalaciones hay un portal por el que entran y salen seres de otras dimensiones. Quien hace estas controvertidas declaraciones es la doctora Astrid Stuckelberger, una científica suiza con más de 20 años de experiencia en salud pública, miembro del consejo de revisión ética de la OMS.

Aunque no tenemos pruebas para aceptar o rechazar las declaraciones de la investigadora de la Universidad de Ginebra y Lausana, es importante recordar que las historias sobre portales interdimensionales han salido del ámbito de la ciencia-ficción para discutirse como algo probable tras la creación del CERN.

El CERN es el laboratorio de física de partículas más grande del mundo. Situado en la frontera entre Suiza y Francia, su misión principal es investigar los componentes fundamentales de la materia, utilizando colisionadores de partículas como el Gran Colisionador de Hadrones (LHC). Una de sus investigaciones más reconocidas fue el descubrimiento del bosón de Higgs en 2012, una partícula fundamental en la comprensión del origen de la masa en el universo. Oficialmente, el CERN se dedica al estudio de las partículas subatómicas, buscando entender los misterios del universo a través de experimentos físicos controlados.

Los científicos del CERN están manipulando energías en niveles tan pequeños que abren puertas a otras dimensiones

La doctora Astrid Stuckelberger

Sin embargo, según Stuckelberger, lo que ocurre en CERN es mucho más inquietante. En una entrevista en Zeee Media, la doctora mencionó que algunos físicos que trabajan allí le habían informado sobre la existencia de 17 dimensiones de la realidad, afirmando que «hay seres que entran y salen» a través de un portal ubicado en las instalaciones subterráneas del laboratorio. Stuckelberger sugiere que estos científicos están manipulando energías subatómicas en niveles tan pequeños que abren puertas hacia otras dimensiones. Incluso relata que un «ser» no humano apareció durante uno de estos experimentos y dejó una prueba tangible: una bufanda.

Si bien las afirmaciones de Stuckelberger pueden parecer fantásticas, la idea de dimensiones adicionales y portales interdimensionales no es nueva en la ciencia teórica. Físicos como Michio Kaku han explicado la posibilidad de un «multiverso» o la existencia de múltiples dimensiones paralelas, conceptos que provienen de teorías avanzadas como la relatividad general y la teoría de cuerdas (perfectamente explicada en el post que insertamos más abajo). Estas teorías especulan que podría haber estructuras en el espacio-tiempo, como los agujeros de gusano, que conecten diferentes puntos del universo o incluso dimensiones diferentes.

Por otro lado, la Dra. Clara Nellist, una física de partículas que trabaja en el CERN, ha abordado estas teorías desde una perspectiva científica, afirmando que comprende la curiosidad de las personas al respecto. Según Nellist, fenómenos como el «Efecto Mandela», que algunos asocian con estos supuestos cambios en la realidad, pueden explicarse por la forma en que nuestra memoria procesa y recuerda los eventos, sin necesidad de recurrir a explicaciones interdimensionales.

Pero, además de las declaraciones de Stuckelberger, abundan las historias de portales interdimensionales en el CERN, como la fotografía obtenida el 24 de junio de 2016 en la que se mostraba una anomalía sobre el laboratorio tras la puesta en marcha del experimento Awake. Historias similares han aparecido en plataformas como Reddit, donde un usuario anónimo afirmó ser un científico del CERN y describió un incidente en 2019 relacionado con un error en el arranque del LHC. Según su relato, este error causó la aparición de una extraña luz amarilla y una esfera oscura que habría desencadenado eventos catastróficos, incluidos la muerte de investigadores y la aparición de una entidad que amenazaba con destruir a la humanidad. Aunque este relato se publicó en la sección de Reddit «r/nosleep», conocida por sus relatos de terror ficticio, sugiere una conexión entre las teorías que rodean al CERN y las especulaciones sobre portales interdimensionales.

Los experimentos del CERN están centrados en la física de partículas y no en abrir portales a otras dimensiones

La conexión entre el CERN y estas teorías también ha sido explorada en medios como Vice, que en 2022 publicó un artículo titulado «¿El CERN está causando una ilusión colectiva al crear portales hacia dimensiones alternas?» Este artículo se refería a una teoría popular que sugiere que los experimentos con el bosón de Higgs en 2012 causaron una ruptura en el continuo espacio-tiempo, trasladando a la humanidad a un universo paralelo. Este tipo de especulaciones también está vinculado al «Efecto Mandela», un fenómeno en el que las personas recuerdan eventos de manera diferente a como ocurrieron en realidad.

Sumemos a todo esto las creaciones digitales como el que insertamos sobre estas líneas y que, de vez en cuando, inundan las redes sociales. El equipo de verificación Lead Stories ya desmintió mensajes similares informando que se trataba de una «creación digital» y no un portal abierto en el cielo de Suiza por el CERN.

A pesar de la fascinación que generan estas teorías, los científicos insisten en que los experimentos del CERN están centrados en la física de partículas y no en abrir portales a otras dimensiones. Las afirmaciones de Stuckelberger y otras teorías similares, aunque intrigantes, se encuentran más en el ámbito de la especulación que en el de la ciencia probada.