- Si ya es extraño que un Gobierno pregunte a sus ciudadanos si quieren ampliar sus vacaciones, mucho más raro es que estos digan que no.
- Pues eso es lo que ocurrió en Suiza.
Aproximadamente un 67 por ciento de los votantes suizos han rechazado este domingo en referéndum ampliar de cuatro a seis las semanas de vacaciones pagadas de los trabajadores, según los datos recogidos por los medios suizos y correspondientes al escrutinio parcial de la votación.
Además, según la empresa demoscópica gfs.bern, la propuesta solo ha sido aprobada mayoritariamente en Jura, uno de los 26 cantones que integran el país. La propuesta tenía que lograr la mayoría global y mayoría en cada una de las regiones para ser aprobada, según la legislación electoral suiza.
La mayoría de los partidos políticos, el Gobierno y las organizaciones patronales habían pedido el voto en contra de la propuesta, ya que, según advertían, implicaría una subida de los costes laborales y una menor competitividad de Suiza.
«El ‘no’ a la propuesta de vacaciones significa sobre todo un ‘sí’ a mantener la competitividad de las empresas suizas y a garantizar los puestos de trabajo», ha asegurado la principal organización patronal suiza en un comunicado. Enfrente, los sindicatos defendían que el nivel de estrés cada vez mayor en los trabajos requeriría un incremento proporcional de las vacaciones.
Este domingo también se votaban varias propuestas más, como lareinstauración de los precios fijos para los libros, que ha sido rechazada, o la limitación del número de segundas residencias al 20 por ciento por comuna, que sí ha salido adelante.