El operador de la central nuclear accidentada de Fukushima reconoció este lunes que agua muy radiactiva se había escapado de los edificios de los reactores, un descubrimiento que podría agravar el temor a una contaminación masiva alrededor de la instalación.
Esta agua contaminada inundó los túneles técnicos que pasan bajo la sala de las máquinas de los reactores 1, 2 y 3.
“Encontramos agua acumulada en los pozos de observación de un sector subterráneo que desemboca en el exterior del edificio del reactor 2, con un nivel de radiactividad superior a 1.000 milisieverts por hora”, indicó un portavoz de la empresa Tokyo Electric Power (TEPCO).
Ya se habían observado capas de agua radiactiva, muy probablemente procedente de los reactores, en el subsuelo de las salas donde se encuentran las turbinas, pero es la primera vez que los ingenieros de TEPCO detectan la presencia de agua contaminada en el exterior.
El jueves pasado, tres empleados fueron expuestos a importantes radiaciones al caminar en agua estancada en la sala de máquinas del reactor 3, medida en 180 milisieverts por hora. Los tres obreros salieron este lunes del centro especializado donde se encontraban. Los médicos no detectaron peligro inmediato para su salud.