Las cosas no vienen ni van,
Las cosas no se mueven.
Las cosas duermen.
Somos nosotros, los que vamos a ellas.
Por esto la memoria no es un arma del espíritu
dispuesta para evocar el pasado.
Es más bien una facultad que nos permite,
en un instante,
ver lo que es, en su esencia, fuera del tiempo.
La memoria nos permite subir a un estadio,
inexplicable para nuestra conciencia,
en el cual todo está presente.
Canek
http://lospasosdelalma.blogspot.com.es/2012/09/la-memoria.html
Hermosos pensamientos, descritos como un poema…
Lo comparto contigo DM, ami la memoria me sirve y mucho.
Un abrazo y Bendición.-