La historia de los hobbit no empezó en la lejana Comarca, sino que comenzó en la lejana Indonesia. Fue allí donde conocimos a nuestros primos, los homo floresiensis, también conocidos comohobbits. Y este viaje inesperado nos ha llevado hasta poder encontrarnos cara a cara con ellos, y las semejanzas son aún mayores de las esperadas.
Una nueva especie
El hallazgo se hizo en 2003, cuando un grupo de científicos indonesios y australianos descubrieron unos restos fósiles en la Isla de Flores. Lo que más llamó la atención fue el menor tamaño del cráneo, maxilar y extremidades traseras. La capacidad craneal era más parecida a la de un chimpancé o un hombre mono.
La primera idea que se tuvo era que pertenecían a individuos de la especie homo sapiens que habrían padecido alguna enfermedad que retrasase su crecimiento, o tal vez tenían su origen en un grupo que tras haberse aislado las condiciones ambientales hubiesen producido esas modificaciones. Los individuos tenían una altura cercana al metro, más pequeños incluso que los pigmeos, con grandes diferencias en el cráneo y el maxilar de los humanos modernos, y se creía que podrían haber sufrido microcefalia, una enfermedad que produce cerebros de menor tamaño.
La sorpresa fue comprobar que los “hobbit“, como fueron apodados, pertenecían una nueva especie, como dedujeron los investigadores William Jungers y Karen Baab tras estudiar un fósil con un esqueleto bastante completo al que llamaron “La chica de las Flores” o Flo. Las diferencias entre las especies llevaron a la conclusión de que habían empezado a evolucionar de un modo independiente hace dos millones de años, por lo que constituyen una nueva especie.
¿Cómo eran los homo floresiensis?
La doctora Susan Hayes nos ha mostrado cómo eran los homo floresiensis a través de una reconstrucción realizada a partir de los cráneos encontrados, y en su opinión el aspecto de los homínidos es “sorprendentemente moderno”. La “aproximación facial” realizada está basada en evidencias científicas, lo que la diferencia de otros trabajos realizados anteriormente, siendo una obra más arqueológica que artística. Esto nos permite conocer mejor cómo eran realmente.
“Ahora que la mayor parte de los científicos han aceptado que es una nueva especie y no un humano enfermo, queda encontrar cuál es su posición en la línea evolutiva de los humanos”, afirmó el doctorDarren Curnoe, de la Universidad de Gales.
Aún en este siglo estamos encontrando nuevas especies que permiten conocer mejor la línea evolutiva que nos ha llevado hasta ser el género predominante en el planeta. Tal vez no seamos tan especiales, y otras especies semejantes se hayan extinguido con anterioridad, ¿tú que opinas?
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Mas allá que no estoy segura, pero no creo en la evolución, pero sí que pudo haber seres humanos con otra contextura física.
el creacionismo como tal no puede existir ya que toda la biblia esta decodificada alegoricamente para que el que busca el conocimiento y se ilustra pueda entender su mensaje velado.
La evolucion tiene varias fallas y es incompleta, con demasiados agujeros, pero se acerca mas a la verdad que cualquier otra teoria por el momento, no se puede discutir eso,