Cerca de medio millón de alemanes reciben el año nuevo con problemas financieros como consecuencia de las medidas de austeridad y el despido masivo de trabajadores. Mientras que las agencias de consultores de deudas calificaron a más de seis millones de alemanes como “insolventes”.
“Los alemanes tienen la tradición de ahorrar lo máximo posible para los días malos. Pero la diferencia entre la capa de la sociedad más rica y la más pobre se hace más y más visible”, afirma a Rusia Today el financista Hans Ulrich Fitz, de la agencia Creditreform.
La mayor agencia financiera de Alemania publica anualmente el atlas de los endeudados del país. En el mapa, marcan con color rojo las regiones en las que una de cada cinco familias se encuentra en sumida en las deudas.
“Durante los años que usted estaba trabajando, empezó a demandar cosas: un buen apartamento, un coche, un seguro, créditos… Y de repente le despiden, pero usted quiere vivir como antes. No le basta la prestación por desempleo y usted acaba endeudado”, explica el financista Ulrich Fitz.
Miles de alemanes reciben el año esperando que la ola de desahucios alcance su casa. Ángela Wolf es una de ellas, está desempleada y no tiene dinero para pagar el alquiler. A mediados de marzo, un juez la etiquetó de “insolvente”.
“No vamos al cine, a ninguna parte. Siempre estamos en casa. Es difícil entenderlo para los niños. Ellos ven cómo viven sus compañeros, como van al mar en verano. Ni hablar de lo que puedo permitirme para mí misma”, lamenta Ángela.
La canciller alemana, Ángela Merkel, afirmó este lunes en su discurso para el nuevo año, que el panorama económico será “más difícil” en 2013 que en 2012 y se necesitará “coraje”.
“El panorama económico no será más fácil, sino más difícil el año próximo. Ello no debe desalentarnos, sino al contrario, estimularnos”, destacó Merkel en el discurso.
Merkel reconoció que “la crisis aún está lejos de ser superada”, sin embargo afirmó que “las reformas que decidimos (en Europa) comienzan a dar sus frutos. Pero todavía necesitamos mucha paciencia”.
Numerosos economistas prevén una contracción del PIB alemán en el último trimestre. Según el Bundesbank, la primera economía europea enfrenta una desaceleración que incluso la podría hundir en una breve recesión.
El Banco Central alemán prevé además un estancamiento de la economía alemana en 2013 con una progresión del PIB de sólo un 0.4 por ciento , tras un 0.7 por ciento este año.