El multimillonario Carlos Slim, mexicano hijo de libaneses, y el magnate estadounidense Bill Gates buscan imponer el negocio del maíz y trigo transgénico en México.
El pasado 13 de febrero se unieron para promover los transgénicos y otras biotecnologías asociadas en el llamado “Centro Internacional de mejoramiento del maíz y trigo”(CIMMYT) , informó La Jornada.
Esta fundación es ahora financiada por Carlos Slim a través de su Fundación Slim, y por Bill Gates a través de su Fundación Bill y Melinda. Fundaciones creadas en relación a un tratamiento especial de impuestos.
Ayer el medio SDP Noticias en una entrevista a Bill Gates, dada esta semana durante la inauguración en México de la actividades relacionadas al maíz y trigo transgénico de la Fundación CIMMYT, se le preguntó qué pasará con los agricultores que afirman y que consideran a los transgénicos una plaga que contaminará las especies locales y hará desaparecer la sana especie natural consumida hasta hoy.
Gates respondió sólo que “el maíz autóctono puede seguir sembrándose por quien así los desee”.
Según SDP Noticias, La Fundación CIMMYT, no presentó hasta la fecha ningún estudio de los daños a largo plazo que puede tener esta ingesta de productos genéticamente modificados en el hombre. En tanto, estudios en animales sobre productos transgénicos por separado de los productos tóxicos que deben usarse como plaguicidas en estos casos, causaron en ambos cáncer y muerte desde la mitad de vida en adelante.
Según La Jornada de México, la cruzada para introducir semillas híbridas, uso de maquinarias y agrotóxicos, comenzó en Cimmyt hace más de 50 años y “posibilitó el asalto de la agricultura por parte de las corporaciones de tóxicos y agronegocios”.
“Olvidaron mencionar que esa primera revolución verde, aunque aumentó el volumen de producción de algunos granos en terrenos planos e irrigados, nos legó un panorama devastador de contaminación de aguas, tierras exhaustas, enorme erosión de suelos, millones de niños malformados y con residuos de agrotóxicos en la sangre desde la cuna, más expulsión de gente del campo”, dice la Jornada.
A su vez el medio mexicano destacó que la Fundación Cimmyt se apropió de miles de semillas recogidas por los campesinos y buscan manipularlas y patentarlas para tener a futuro los derechos económicos.
La fundación dijo que entregará las semillas sin que los campesinos tengan que pagar patente, pero no se sabe hasta cuándo. Hasta ahora las semillas de maíz eran seleccionadas por los campesinos tras sus cosechas, un bien propio, nunca habían dependido de terceros.
La Fundación Gates compró a su vez cerca de 500.000 acciones de Monsanto en 2010, que a su vez recibe los beneficios económicos de programas millonarios creados para su efecto por la Fundación Gates, informa La Jornada. Monsanto vende semillas transgénicas, y todas ellas son de una sola cosecha, por lo que no se pueden obtener semillas propias. Sus cultivos requieren la compra de muchos productos agrotóxicos que matan abejas y todas las especies vivientes en estos terrenos.
En Campeche el 6 de febrero murieron las abejas de 1500 colmenas de la comunidad de Hopelchén, por la fumigación de transgénicos Monsanto. 50 familias se quedaron sin sustento al menos un año, informó el medio mexicano en uno de los ejemplos de daños y efectos que los cultivos transgénicos están causando en las regiones y estados de México.
Una cuadrilla de sinverguenzas y ladrones…
Permitir ser manipulados por mentes enfermas es tanto o más patológico que estos «señores».