El arzobispo de Chipre Crisóstomo reunido hoy con el presidente del país, Nikos Anastasiadis, dijo que la Iglesia Ortodoxa de Chipre está dispuesta a conceder al Estado todos sus bienes si eso ayuda a zanjar la crisis.
“Podemos hipotecar todos los bienes de la Iglesia y ofrecer ese dinero para adquirir bonos. Los bienes de la Iglesia son enormes”, señaló.
El arzobispo felicitó a los diputados del parlamento chipriota por haber emitido “una señal clara a Europa de que debe aprender a respetar también a los países pequeños”.
Entrevistado antes por la cadena de televisión Skai al cierre de la votación en el Parlamento, Crisóstomo dijo que los europeos quieren estrangular la economía de Chipre. Indicó también que los chipriotas deben salir de la zona del euro en la primera oportunidad que se presente y recuperar su moneda nacional.
El Parlamento de Chipre declinó el martes el proyecto de ley que preveía gravar con un impuesto único del 6,75% al 9,9% los depósitos bancarios. No lo apoyó ningún diputado. La prensa califica esta actitud como un “No histórico” y la compara con la decisión de Grecia de rechazar el ultimátum italiano en 1940.
El 28 de octubre de 1940, la Italia fascista invadió a Grecia, después de que el Gobierno griego respondiera con un decidido No a un ultimátum de Mussolini, en que el dictador exigía bases estratégicas en su territorio.