Hace más de un mes que no se observan peces en las aguas del Titicaca, en la zona de la comunidad Chimú en la bahía interior de Puno, luego de una masiva mortandad. Esta semana la Universidad Nacional del Altiplano de Perú confirmó que las causas son las aguas residuales con altos niveles tóxicos de selenio, plomo y telurio.

“El análisis realizado con el microscopio electrónico de barrido, señalan que los lodos contienen: selenio, telurio y plomo como elementos tóxicos en concentraciones por encima del límite máximo permisible que son un serio peligro para la salud ambiental y pública”, comunicó la Universidad el 15 de abril.

En el estudio, en el cual participaron un grupo de cinco docentes de la Universidad con el apoyo de dos investigadores se confirmó la versión de los pobladores que no hay peces en las aguas.

“Se tendieron redes de pesca, durante 15 horas en la zona de estudio, no habiéndose capturado peces de ninguna especie”, dice el comunicado, agregando que según versiones de los pobladores, “en esta zona no hay pesca desde el evento de mortandad el 10 de marzo”.

Los docentes concluyeron que la laguna de estabilización de las aguas de Espinar, localizada en las proximidades, es la que está contaminando. En esta laguna llega el 80% de los desagües de la ciudad de Puno y en el interior reciben “un precario tratamiento”.

El Dr. Lucio Ávila de la Universidad Nacional del Altiplano, pidió a las autoridades un urgente tratamiento de las aguas servidas. De estas aguas procede parte del agua potable de Puno y advirtió serios riesgos para dicha población.

En la investigación participaron los docentes. Dr. Edmundo Moreno Terrazas, Dr. Sabino Atención Limachi, Dr. Edwin Boza Condorena, MSc Gilmar Goyzueta Camacho, MSc. René Alfaro Tapia, con el apoyo del Dr. George Argota Pérez y M.Sc. Martin Choque Yucra.

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