Los sistemas de defensa antiaérea desplegados por Rusia en Siria responderán a cualquier amenaza proveniente de terceros países para los aviones en misiones de combate contra el terrorismo, anunció el viceministro ruso de Defensa, Anatoli Antonov, citado por la agencia RIA Novosti.
Los sistemas S-400 «permiten con anticipación detectar una amenaza para los aviones rusos que toman parte en la operación antiterrorista en Siria, y en caso de ser necesario tomar medidas adecuadas para garantizar la seguridad de sus vuelos», señaló el viceministro, haciendo referencia a una posible intervención de la aviación turca sobre territorio sirio.
En caso de que la Fuerza Aérea turca inicie una operación en Siria, debe acogerse a las disposiciones del memorándum ruso-estadounidense sobre la seguridad de vuelo en el espacio aéreo sirio, señaló el viceministro.
Turquía viola sistemáticamente el Tratado de Cielos Abiertos creando un «peligroso precedente», ya que no es posible supervisar la actividad militar de uno de sus países suscriptores, lamentó Antonov.
Este lunes Ankara negó a Rusia realizar un vuelo de observación sobre su territorio, como estipula el Tratado.