Documental de la serie Casos de Conspiración del año 2.006 en el que se presenta la historia de la supuesta relación y descendencia de Jesús con María Magdalena, ocultos durante siglos por el Priorato de Sion en el Sur de Francia.
El Código da Vinci
En el año 2.003, Dan Brown escribió El Código da Vinci, en el que se presentaba, en forma de novela de ficción, una controvertida teoría según la cual Jesús había estado casado y tenido hijos con María Magdalena y que, tras la crucifixión, huyendo de la persecución a los cristianos embarcó hacia la costa sur de Francia donde sus descendientes vivieron a salvo hasta emparentarse con la dinastía de los reyes merovingios. Una orden secreta, el Priorato de Sion, y una línea de Grandes Maestres de la orden han mantenido durante siglos información secreta sobre el linaje de Jesús que aún perdura hasta nuestros días.
La historia de acción no es especialmente original pero el polémico trasfondo de la historia cautivó a millones de personas que convirtieron el libro en uno de los mayores éxitos de ventas de este siglo.
Poca gente, sin embargo, es consciente de que, aparte de la aventura de acción del protagonista, todos los hechos ‘históricos‘ que se van descubriendo habían sido descritos en los años 80 en el libro El Enigma Sagrado, escrito por los investigadores Henry Lincoln, Richard Leigh y Michael Baigent.
El Enigma Sagrado
Todo empezó cuando dichos autores comenzaron a investigar la historia de un supuesto tesoro oculto en la pequeña localidad francesa de Rennes le Château y del sacerdote que, a finales del siglo XIX, lo encontró.
El arqueólogo Bill Putnam explica que dicho sacerdote, Bérenger Saunière, gastó una inmensa fortuna, muy por encima de sus posibilidades económicas, en reformar la iglesia, comprar tierras, construir una villa e incluso en hacer una carretera para el pueblo. En dinero actual serían unos 70 millones de Euros.
Al parecer, al hacer una pequeña reforma en el altar de la iglesia encontró dos documentos que le guiaron hasta un tesoro o secreto que le dieron acceso a esa gigantesca fortuna.
Saunière muere en 1.917 y deja como heredera a su ama de llaves, Marie Dénarnaud, que sigue viviendo allí hasta su muerte en 1.953. Ella hizo correr el rumor de que poseía un secreto que quien lo conociera podría hacerse inmensamente rico, pero nunca llegó a decir cuál era ese secreto.
Treinta años más tarde, los periodistas Lincoln, Leight y Baigent investigan esta historia.
Al examinar los documentos encontrados por Sauniere, Lincoln descubre un mensaje encriptado que habla de Dagoberto II, rey francés de la dinastía merovingia asesinado en el año 679.
En la Biblioteca Nacional de Francia, Lincoln encuentra unos documentos escritos por Henry Lobineau, Les Dossiers Secrets, que les conduce a descubrir una sociedad secreta milenaria llamada El Priorato de Sion.
Según avanza la investigación, los autores descubren una relación entre el Priorato de Sion y la Orden de los Templarios. Al parecer la Orden del Temple fue creada por el Priorato como un brazo ejecutor y administrativo del mismo.
Entre los Dossiers Secrets también aparece una genealogía que se remonta desde los reyes merovingios hasta la actualidad y un sorprendente listado de los Grandes Maestres del Priorato, entre ellos Leonardo da Vinci, Isaac Newton, Victor Hugo, Jean Cocteau y otros no tan conocidos, pero todos ellos con la misión secreta de conservar y proteger el linaje de los reyes merovingios.
Ya que la Orden del Temple siempre fue considerada la guardiana del Santo Grial, la copa que contuvo la Sangre de Jesús, los investigadores consideran que tal vez no se trate de San Greal, sino de Sang Real, la Sangre Real de Jesús. De esta hipótesis y varios indicios que parecen confirmarla, llegan a la conclusión de que la dinastía merovingia protegida por el Priorato de Sion tiene su origen en el mismo Jesús y la descendencia que tuvo con María Magdalena.
La idea de que Jesús estuviera casado con María Magdalena parece estar apoyada por varios evangelios apócrifos, especialmente El Evangelio de Felipe, cuando afirma que María era considerada la más importante de los apóstoles y (logon 55) que Jesús la amaba más que a los otros discípulos, besándola a menudo en la [¿boca? ¿mejilla?], lo que provocaba los celos de Pedro, Andrés y algunos otros discípulos.
La escritora Margaret Starbird ha estudiado una leyenda tradicional que se cuenta desde hace siglos en el Sur de Francia donde se narra que María Magdalena, junto con su hermano Lázaro y otros miembros de su familia, huyendo de las persecuciones religiosas de Israel llegó en el año 42 a la costa francesa, llevando el Santo Grial, o Sangre Real, en forma de una niña, Sara, hija póstuma de Jesús.
Allí encontró refugio en una de las comunidades judías que ya existían en la zona y su linaje perduró durante unos 400 años. Al parecer este linaje emparentó con los reyes francos dando lugar a la dinastía merovingia, a través de la cual siguió existiendo el linaje de Jesús.
La ley francesa, en los años 1.950, estableció que todas las asociaciones debían estar registradas, y los periodistas encontraron en el registro de asociaciones las actas de constitución de la orden Priorato de Sion, registrada en 1.956 por Pierre Plantard. Éste era un francés de mediana edad y gran conocedor de la historia francesa que tras varias entrevistas en 1.979 les confesó que su apellido completo era Plantard de Saint Claire, y que era el último descendiente de la dinastía merovingia.
El libro El Enigma Sagrado se publicó en 1.982 causando gran expectación y polémica.
Un Castillo de Naipes Flotando en el Aire
Bart Ehrman, jefe del Departamento de Estudios Religiosos de la Universidad de Carolina del Norte piensa que toda esta teoría es un endeble castillo de naipes construido sobre una base tan endeble que ni siquiera existe.
El manuscrito original del Evangelio de Felipe está tan deteriorado que faltan muchas palabras. De hecho, lo único que se puede descifrar en el pasaje mencionado es:
Entonces Jesús […] María Magdalena y solía […] la besaba con frecuencia […] en su […]
A partir de esas palabras es fácil hacer casi cualquier interpretación y lo único que se deduce con bastante seguridad es que Jesús besaba con frecuencia a María Magdalena, pero ni sabemos dónde, ni podemos deducir con seguridad que entre ellos hubiera una relación íntima.
De hecho, ni siquiera el hecho de que la besara, aunque fuera en la boca, demostraría nada, pues en aquella época los cristianos solían besarse en la boca, no solo hombres y mujeres, sino también dos hombres, sin que en ello hubiera connotaciones sexuales.
Para nuestra cultura occidental puede parecer chocante, pero en Rusia es habitual saludar con un beso en la boca. Es famosa la fotografía de Brezhnev besando en la boca a Honecker.
También se conserva esa costumbre en la Iglesia Cristiana Ortodoxa.
En cuanto a que Jesús estuviera casado, no existe ningún comentario en ningún texto antiguo, ni en los evangelios canónicos, ni en las epístolas de los apóstoles ni siquiera en los evangelios apócrifos.
De haber estado casado, los evangelios lo hubieran mencionado, y si hubiera tenido hijos es seguro que éstos hubieran tenido una importancia crucial en la Iglesia como hijos del Mesías.
El hecho de que no se mencione ninguna de estas dos posibilidades sugiere que, realmente, no había nada que mencionar.
Al contrario: Si no se menciona es porque Jesús, en ese aspecto, era un tipo corriente igual que todos los judíos corrientes de la época. Y un tipo de 40 añazos que se mantuviera célibe si que hubiera resultado raro, rarito. Aparte de que desobedecería el Primer Mandamiento: Creced y Multiplicaos.
Es más, entre los apóstoles se coló un advenedizo, Pablo, que era un misógino del copón, de los que pensaban que las mujeres calladitas y tapadas, y que recomendaba el matrimonio sólo para aliviar los ‘picores’ pero que si se podía aguantar era mejor no casarse.
Un tiparraco así, si Jesús hubiera estado soltero, enseguida lo hubiera puesto como ejemplo a seguir. Pero Pablo nunca puso a Jesús como ejemplo de celibato, y eso significa que no pudo porque Jesús, como todos los judíos corrientes de 40 años, estaba tan casado como el que más.
Que su esposa fuera María Magdalena, eso ya es discutible, pero para mí es seguro que Jesús estuvo casado y tuvo hijos.
Un Don Nadie con Grandes Pretensiones
Según el arqueólogo Bill Putnam, toda la historia ha sido inventada por Pierre Plantard. Éste, un modesto funcionario con gigantescas pretensiones, quería demostrar que era descendiente de la realeza francesa y para ello inventó unas genealogías que parten de uno de los reyes más desconocidos de la dinastía merovingia, Dagoberto II. También en 1.956 registró en el Registro Nacional de Asociaciones una orden, el Priorato de Sion, y archivó en la Biblioteca Nacional Francesa los Dossiers Secrets, una serie de documentos elaborados por él mismo en los que se describía una supuesta historia del Priorato y la lista de Grandes Maestres del mismo desde el siglo XI hasta la actualidad.
En esta lista no se privó de incluir a algunos de los personajes más famosos de la historia.
Al conocer la historia del sacerdote Bérenger Saunière, la entroncó con la historia que él mismo estaba pergeñando, dando pábulo a una serie de fantasías cada vez más fabulosas.
La historia inventada por Plantard no llegaba más lejos, pero veinte años más tarde, cuando los periodistas Lincoln, Leight y Baigent comienzan a investigar esta historia, la relacionan con las numerosas leyendas locales que hablan de María Magdalena y su supuesta visita a Francia y llegan a la asombrosa conclusión de que los reyes merovingios eran ¡los descendientes de Jesús y María Magdalena!
Actualmente Lincoln y Leight son mucho más circunspectos de lo que lo fueron en el año 1.982, cuando publicaron El Enigma Sagrado. Afirman que lo que hicieron fue exponer una teoría pero Putnam y Ehrman piensan que lo que pasó fue que los periodistas se tragaron una gran mentira pergeñada por Plantard y que ellos la agrandaron aún más relacionándola con María Magdalena y Jesús.
En mi opinión
No se mencionan a los dos cómplices de Plantard, el aristócrata arruinado experto en genealogías que le ayudó a crear la dinastía que llegaba desde los Reyes Merovingios hasta él, y el escritor Gèrard de Séde que convirtió toda la historia que estaban inventando en el libro El Oro de Rennes, publicado en 1.977 y que al ser leído por Lincoln lo embarcó a él y a sus colegas en la búsqueda de esta quimérica historia.
Por lo demás, se puede encontrar información adicional en el documental El Cura, su Amante y el Santo Grial y en el artículoEl Código da Vinci
http://www.maslibertad.com/Casos-de-Conspiracion-La-Historia-Secreta-de-Jesus_p960.html