El desafío de la inteligencia artificial pone en jaque la seguridad mundial.
Imagen ilustrativa
Pixabay / geralt
Un nuevo informe elaborado por 26 expertos en materia de seguridad enciende las alarmas por el desarrollo de la inteligencia artificial (IA) y el potencial uso malintencionado de las nuevas tecnologías por Estados, delincuentes y terroristas.
El uso de drones como armas y de bots para crear propaganda o videos manipulados, la extensión de ciberataques cada vez más sofisticados y la vigilancia a través de la recopilación masiva de datos son algunos de los ejemplos de los retos que representa la IA para la seguridad mundial.
Los autores del informe no se olvidan de que la IA también supone beneficios y grandes avances para la sociedad, pero advierten de que el uso malicioso planteará amenazas para la seguridad, tanto digital como física y política.
El ‘spear phishing’ ―estafas de correo electrónico para obtener acceso a datos confidenciales de grupos u organizaciones―, la síntesis de voz para la suplantación de identidad, el uso de vulnerabilidades existentes del ‘software’, ataques con drones y otros sistemas automatizados, la generación de accidentes de vehículos autónomos a través de ciberataques contra los sistemas de control, las campañas de desinformación, y el robo de datos personales, son los desafíos reales a los que la sociedad tendrá que hacer frente, tanto a nivel político como técnico.
Defenderse contra ataques de este tipo no será una tarea fácil. Los expertos proponen también utilizar la inteligencia artificial y automatizar los sistemas de defensa cibernéticos, pero agregan que «la defensa basada en la IA no es una panacea, sobre todo si miramos más allá del dominio digital».
El coautor del estudio, Sean O hEigeartaigh, director ejecutivo del Centro para el Estudio del Riesgo Existencial de la Universidad de Cambridge, ha señalado que el informe presenta una visión de «cómo será el mundo en los próximos cinco o diez años».
«Es preocupante, pero necesario, considerar las implicaciones de la piratería informática, la vigilancia, la persuasión y la identificación de objetivos físicos sobrehumanos, así como las capacidades de inteligencia artificial que son infrahumanas pero, sin embargo, mucho más ampliables que el trabajo humano», ha advertido otro coautor del informe, Miles Brundage, del Instituto para el Futuro de la Humanidad de la Universidad de Oxford.