El sitio web Government Attic publica documentos desclasificados del gobierno de Estados Unidos. Recientemente se obtuvieron tres documentos de la CIA, fechados entre 1963 y 1064.
Uno de los documentos salta a la atención. Se trata de una conversación entre un agente de la CIA y el profesor D.A. Kerimov de la Universidad de Leningrado. El documento es una transcripción de esta conversación mientras bebían alcohol, y está lleno de anécdotas bastante raras e de ideas disparatadas sobre la “percepción extrasensorial”. Ambos discuten las últimas incursiones en la tecnología soviética para el control mental. Aparentemente este era un tema muy común entre los espías de la Guerra Fría.
El profesor Kerimov explica que había escuchado que unos científicos en Kiev estaban trabajando en un proyecto que, se supone, lograba «intervenir» la actividad cerebral de un músico experto mientras tocaba el piano. De alguna manera, esta actividad cerebral podía ser grabada y reproducida en el antebrazo de alguien no fuera músico, de manera que le permitiera tocar el piano como si fuera un pianista experto. El profesor Kerimov se negó a dar detalles sobre la investigación, mientras que el agente de la CIA afirma que algunas de estas historias son muy dudosas.
En otro proyecto, los investigadores soviéticos desarrollaron una simulación de un «ojo de rana» con el objetivo de vigilar los aeropuertos. Otra vía de investigación exploraba la comunicación entre humanos y computadoras a través de la telepatía.
Una de las afirmaciones más atrevidas de las pláticas entre estos dos personajes, gira en torno a la supuesta capacidad de algunas personas para mostrar una «percepción extrasensorial». El profesor Kerimov sugiere que tienen pruebas de que algunas personas son capaces de captar las «ondas» cerebrales de otras e incluso hacer uso de esta habilidad para predecir «futuros acontecimientos aleatorios». Kerimov reconoce que estas ideas nunca se tomaron en serio en el pasado, pero que poco a poco iban ganando adeptos entre sus colegas durante los años de la Guerra Fría.
El agente de la CIA termina su informe indicando que no obtuvo muchas pruebas tangibles de su conversación con Kerimov, pero señala que la exploración de la URSS sobre la percepción extrasensorial no parecía ser una amenaza para la seguridad nacional estadounidense. Tal vez porque cuando el agente le preguntó a Kerimov sobre los avances concretos de estas investigaciones, el profesor no pudo dar un solo ejemplo sólido.
Los servicios de inteligencia estadounidenses no fueron ajenos a los intentos de desarrollar tecnología de control mental durante la Guerra Fría. Para nombrar algunos ejemplos: el MKUltra y el Proyecto Stargate o la creación de perros dirigidos por control remoto. En 1983, la CIA redactó un oscuro informe sobre la «Gateway Experience» (La experiencia del umbral), en el que se afirmaba que un estado alterado de la conciencia humana podía ser capaz de trascender el espacio y el tiempo. Siguiendo esta lógica, hicieron el intento, fallido, de hablar con marcianos, para esto entrevistaron a un psíquico durante un trance, en este trance supuestamente «visitaba» Marte hace un millón de años.
El agente también afirma que nunca se enteró de ningún desarrollo soviético que fuera más adelantado que la tecnología con la que contaba Estados Unidos durante la Guerra Fría. Si los informes estadounidenses sobre las investigaciones soviéticas nos parecen absurdas, sólo queda imaginarnos los reportes que hacían los espías de la Unión Soviética informando sobre las tecnologías estadounidenses. Seguramente igual de absurdos.
https://pijamasurf.com/2022/04/informes_desclasificados_de_la_cia_de_los_anos_60_revelan_las_investigaciones_sovieticas_sobre_cibertelepatia/