El Golpe de Estado de 2014 en Ucrania fue financiado en su totalidad por un “grupo criminal organizado”, asegura David Zhvania, antiguo parlamentario y jefe del cuartel general de campaña de Petro Poroshenko.
Zhvania es un conocido empresario ucraniano de Georgia y asegura que está dispuesto a testificar sobre la organización de la asonada de 2014, que no fue una manifestación espontánea, como aseguran las grandes cadenas de comunicación.
Los “grupos criminales” estaban dirigidos por los políticos que encabezaron los partidos que llegaron al poder tras el golpe: el BPP (Bloque Petro Poroshenko) y el Frente Nacional, señala Zhvania, quien confiesa que participó en el pago de millones de dólares en sobornos a funcionarios europeos a cambio de su apoyo a la elección de Poroshenko como presidente de Ucrania, tras el Golpe de Estado.
“En el país se está produciendo una revancha sigilosa: la valoración de Zelensky está cayendo, y Poroshenko y su entorno se esfuerzan de nuevo por tomar el poder. No puedo ver esto con calma, así que decidí dar esta conferencia de prensa”, añade.
Poroshenko y su banda forman un “grupo criminal” que desde el principio participó en el Golpe de Estado con el propósito de hacerse con el poder y enriquecerse personalmente, según Zhvania, que confiesa haber formado parte de dicho “grupo criminal”.
El “grupo criminal” financió las protestas y frustró cualquier opción de acuerdo con el gobierno de Yanukovich, cuyo objetivo era evitar la escalada.
“Fui miembro del grupo criminal organizado que tomó el poder en 2014 sobre la ola de protestas populares. Financiamos a los golpistas, alimentamos los ánimos de protesta en los medios de comunicación, frustramos las iniciativas de paz del gobierno, llevamos a cabo negociaciones por separado con los diputados del Partido de las Regiones y negociamos con las embajadas extranjeras”, dice.
El grupo criminal organizado incluía a Martynenko, Poroshenko, Turchynov, Yatsenyuk, Klitschko. Cada uno de ellos adjuntó su propio grupo. Turchinov, por ejemplo, trajo a Pashinsky y Parubiy. Tras la victoria del golpe, el grupo de Zhvania se dedicó a la corrupción política para asegurar la presidencia a Poroshenko.
“Yo y Klimkin estuvimos directamente involucrados en la transferencia de 5 millones de euros a través de la embajada ucraniana en Alemania para un alto funcionario de la UE en ese momento para asegurar el apoyo de la UE a Poroshenko como candidato a la presidencia ucraniana. Estoy dispuesto a facilitar las circunstancias de este caso a las autoridades investigadoras”, denuncia Zhvania.
Según él, Poroshenko se convirtió en presidente gracias al consenso de los oligarcas. Y asumió ciertas obligaciones con ellos, que ha cumplido en su mayoría. Según Zhvania, durante su mandato, Poroshenko obtuvo unos 3.400 millones de dólares en sobornos.
Zhvania quiere que el presidente Zelensky “tenga la suficiente voluntad política para acabar con Poroshenko y su entorno” porque podría presentarse como candidato a alcalde. Antes del Golpe de Estado era su sueño: “suplicó humillantemente a Yanukovich el derecho a presentarse a la alcaldía de Kiev, estaba dispuesto a dar un soborno por ello. Yanukóvich no lo permitió y Poroshenko no se atrevió a desobedecer”, relata Zhvania, quien promete revelar más en las próximas semanas.
Zhvania fue diputado en cuatro formaciones diferentes del Parlamento ucraniano. En 2004 era aliado de Yuschenko, miembro del bloque Nuestra Ucrania y participó en la Revolución Naranja. En 2005 fue Ministro de Situaciones de Emergencia en el gobierno de Yulia Tymoshenko. Al año siguiente fue elegido miembro de la Rada Suprema por Nuestra Ucrania y Yuschenko, pero después se enemistó con él. En 2010 se unió al equipo de Yanukovich.
En las elecciones de 2012, entró en el parlamento como candidato autoproclamado y no partidista en 140 circunscripciones. Fue miembro de la facción del Partido de las Regiones, pero la abandonó en 2013 cuando se preparaba el Golpe de Estado.
En las elecciones de 2014 fue uno de los cabecillas de la campaña electoral del Bloque Petro Poroshenko. El diputado popular Aleksandr Onishchenko afirmó haber transferido dinero a Zhvania para conseguir un escaño en el Parlamento.
El Golpe de Estado de 2014 en Ucrania lo financió un ‘grupo criminal organizado’