Otra Luna Nueva potente e imprevisible, como lo fue la Luna Nueva del mes pasado en Géminis.
Esta vez la Luna se junta con el Sol en el signo de Cáncer y nada más y nada menos que en una Gran Cruz con Plutón y los Nodos Lunares. Estas son energías que nos confrontan con el pasado que debemos soltar para dirigirnos a un nuevo capítulo de nuestra vida. Soltar no significa abandonar, olvidar, o renunciar, simplemente «dejar ir» = dar libertad. Soltar el control sobre algo o alguien con lo que nos hemos sentido unidos o de lo que o quien hemos estado cuidando en el pasado.
«Dar libertad» envuelve «confiar» en que lo que existió, lo que nos unió, lo que hemos dado y recibido, tiene un valor importante para las dos partes envueltas. Cáncer, el arquetipo de la Madre, cuida, alimenta, ayuda a crecer. En su parte más oscura, Cáncer quiere mantener eso que cuida para siempre a su lado. La Co-dependencia es una adicción canceriana. Se apega a aquello que le necesita para poder dar sentido a su vida- Aprender a Soltar aquello que ya ha crecido y ya no nos necesita, es parte del proceso de aprendizaje de este signo. Esto aplica a muchos aspectos de la vida de Cáncer, no sólo relaciones. Si acaso, la más importante, la separación de Madre. Aprender a pensar, actuar, Ser, si bien guiados por el aprendizaje de nuestro propio linaje y educación familiar, pero de una forma absolutamente individual y personal. Sólo tenemos una vida para Ser quien hemos venido a Ser, como para malgastarla siendo lo que otros quieren o esperan que seamos.
Plutón nos deja saber que ha llegado el momento de «soltar», algo que ya ha concluido y nos recuerda que ha llegado la hora (el Kairos) de completar un capítulo para iniciar uno nuevo. No hay final sin principio y viceversa. En esta existencia cíclica que es nuestra vida sobre este planeta, todo sigue ese patrón. Todo concluye y vuelve a empezar pero nunca idénticamente a la vez anterior. Siempre hay una evolución, un cambio, una nueva manera que acarrea las memorias anteriores y se abre a una nueva posibilidad. Si entendemos este simple proceso, la vida siempre es estimulante e interesante.
La Luna y el Sol hacen también un sextil a Urano lo que también indica ese carácter liberador del momento. Esa posibilidad de dejar atrás una situación que nos mantiene prisioneros creativa y emocionalmente, aquello que nos sofoca. A menudo esta liberación ocurre interiormente antes de poder realizarla concretamente. Una vez que tenemos la certeza que no nos importa las consecuencias de tal ruptura o separación, entonces podemos caminar hacia ella.
Neptuno colabora desde Piscis, formando un trígono a la Luna, lo que nos ayudará a visualizar nuestros anhelos y recordar que no debemos abandonar nuestros sueños, ya que a menudo cuando creemos que todo está perdido, una ventana se abre y de repente vemos un panorama que no habíamos visto antes y que nos abre un mundo nuevo de posibilidades.
La Luna en su propio signo de Cáncer se encuentra cómoda y protegida, por tanto, más confidente y segura de si misma. Escucha las recomendaciones de Plutón pero se lo toma con mucha calma y cauteloso optimismo. Esto no quiere decir que deje de cuestionarse sus raíces y sus intenciones más profundas. No siempre nacemos en la tribu adecuada para nuestros talentos y destino. A menudo es necesario trasladarse a nuevas tierras para poder dar máxima expresión a nuestra creatividad y encontrar aquellos que la valoren. Como dice el refrán: «Nadie es profeta en su propia tierra». Este también es un momento para re-evaluar si nos encontramos en la Tribu adecuada, que nos valora y nos estimula creativamente. Esta Luna coincide con el comienzo del Retrógrado de Venus en Leo, evento muy importante de este año, que nos llevará a RE-evaluar y RE-considerar estos temas, particularmente si estamos en el lugar adecuado para poder dar rienda suelta a nuestra creatividad, o si estamos en la relación adecuada para poder ser la mejor versión de nosotros/as mismos/as. Si nuestra relación está sufriendo una crisis, es posible que sea el momento de Re-considerar si es lo que necesitamos o si ya ha cumplido su propósito.
Kirón y Eris forman cuadratura a esta Luna Nueva, y un sentido de alienación se apodera de nosotros, y nos recuerda que sentirnos desplazadas/os, solas/os y no valoradas/os es también una condición Humana. En algún lugar de nuestra psique, el dolor y el reconocimiento del trabajo a hacer para aliviar el dolor del alma, estamos absolutamente solos. Podemos hacer terapia, estudiar, formarnos y trabajar con nuestro trauma particular, pero este es un proceso interno extremadamente solitario y así debe ser, porque no hay dos seres humanos iguales a pesar de tener tantas cosas en común con los demás. La Astrología es el más sublime recordatorio de ello, pues no hay dos cartas natales iguales, ni siquiera en mellizos. El trabajo que hemos venido a hacer, el camino del Héroe, es un camino solitario y nadie lo puede hacer por nosotros.
Cáncer es un signo femenino, representa la Gran Madre, la que nos ayuda a crecer, a desarrollarnos y convertirnos en lo que hemos venido a Ser. La que nos acompaña desde el principio de nuestra vida y luego debe soltarnos para que podamos Ser por nosotras/os mismas/os. ESte proceso de «soltar» es lo que nos pide esta Luna Nueva en Cáncer en oposición a Plutón y cuadraturas a los Nodos Lunares.
Medita que es lo que debes «soltar» y aunque el nuevo comienzo no esté claro aún, anímate a largar y esperar. Lo nuevo vendrá seguro. Suelta y confía.
Feliz Luna Nueva a Todas/os!!!!!