México transita por una grave crisis de seguridad. Diversos factores provocaron el auge del narcotráfico que para cimentar su poder ha recurrido a prácticas terroríficas. Los asesinatos y desaparecidos se volvieron pan de cada día en el país; pero ahora ha surgido un nuevo escándalo.
El domingo 13 de agosto la autoridad mexicana registró una casa en Veracruz para detener una célula criminal. Durante la intervención policial fueron hallados restos humanos conservados en bolsas de plástico dentro de hieleras y refrigeradores. La fiscal Verónica Hernández, afirmó a los medios el lunes 14, una cifra preliminar de 13 cuerpos (pero eran tantas las bolsas en los refrigeradores que la prensa especuló y reportó que podrían ser 34). Los hallazgos de difuntos en México han sido tantos, que al principio pasaron desapercibidos; sin embargo pronto saltó la pregunta ¿conservados en bolsas dentro de refrigeradores? ¿Para qué?
En el triángulo de Guerrero, Michoacán y el Estado de México, había campamentos donde se practicaba el canibalismo
Hubo quienes afirmaron que podrían usarlos para alimentar animales exóticos que tanto encantan al crimen organizado y así desaparecer las huellas criminales. Ante la pregunta, la ex subprocuradora de Derechos Humanos, activista y funcionaria pública, Eliana García dio una respuesta que se dio a conocer en Aristegui Noticias en voz del analista político Alfredo Figueroa el miércoles 16 de agosto: “Desde que estaba de comisionado en Michoacán, Alfredo Castillo Cervantes (2014), denunció y nadie retomó el tema, que en el triángulo de Guerrero, Michoacán y el Estado de México, había campamentos de la familia michoacana en donde se practicaba el canibalismo; y tuvimos testimonio directo de una señora que logró escaparse de uno de esos lugares, en donde ella contó los horrores que tenía que hacer como cocinera de ese campamento.”
Con una hipótesis que parecía irracional, hubo quienes recordaron que hace un año, en junio de 2022, el antropólogo especializado en la muerte, Dr. Claudio Lomnitz, dio una conferencia inquietante en el prestigioso Colegio Nacional: “El canibalismo hoy”.
El Dr. Claudio Lomnitz dijo que hay zonas de silencio en México donde el canibalismo era un acto innegable
Más allá de los sacrificios humanos rituales prehispánicos, la leyenda urbana de los tamales de carne humana o casos aislados de asesinos seriales, Lomnitz contaba que existían zonas de silencio en México donde el crimen organizado es tan fuerte, que no existe comunicación alguna con esos sitios y donde “se ha desdibujado la separación entre el bien y el mal”. Ahí, el canibalismo era un acto innegable.
Podría parecer una afirmación descabellada, pero cuando en agosto de 2020 el cártel Jalisco Nueva Generación difundió un video en redes sociales, el acto desconcertó a los medios locales. Un sicario del cartel con un criminal rival maniatado en el suelo, estando aún viva la víctima, extirpó su corazón y se lo comió ante las cámaras mientras un grupo de sicarios detrás de él gritaban “¡Los vamos a exterminar!”.
Lomnitz decía que al interior del Cartel del Golfo inició esta práctica mística con el fin de cimentar su poder “Se obliga a los reclutas a comer carne de una víctima como acto obligatorio para poder ingresar […] Me parece que es parte de una manera muy radical de trazar una diferencia entre la gente: los que valen, no valen y los que no valen nada”.
Los narcosatánicos mezclaron ocultismo, sacrificio humano y crímen organizado a finales de los ochenta
La historia remonta para muchos al 6 de mayo de 1989 cuando un grupo de fieles del palo mayombe fueron detenidos en la Ciudad de México, acusados de usar restos humanos para crear amuletos, pócimas y aceites para narcotraficantes. El grupo fue apodado por la prensa como los narcosatánicos y solo fue puesto en la mira cuando una de sus víctimas resultó ser un joven norteamericano, en un afamado suceso que mezclaba el ocultismo, el sacrificio humano y el crimen organizado.
En el segundo momento (a partir de 2006), según Lomnitz, ya no había santería, esoterismo, ni ceremonias. El rito lo conducía el líder carismático. Sin embargo si había nexos latentes con lo místico. La lista empieza en santos populares como la Santa Muerte, Jesús Malverde o incluso el mismo líder del cartel de los Caballeros Templarios que buscó ser venerado a toda costa hasta su “segunda” muerte en 2014.
El canibalismo construye complicidad, por eso Lomnitz lo identifica en un tercer momento. De Heriberto Lazcano, líder del cártel de los Zetas, había rumores de que arrojaba vivos a sus enemigos a sus tigres mascota. Para reprenderlo por investigar nexos del gobierno del entonces presidente Felipe Calderón con el narcotráfico, el periodista Jesús Lemus Barajas fue enviado a prisión 1100 días junto a los capos más peligrosos del país. Ahí halló una oportunidad para entrevistarlos.
En una de ellas, Juan Limón, jefe del cártel de los Zetas contó sobre su líder Lazcano: “- Sé que tiene un rancho con un zoológico, pero no he sabido que aviente a sus enemigos a los leones; a esos más bien los ejecuta en forma rápida. A sus enemigos más bien se los come él”.
La entrevista redactada en el libro “Los malditos. Crónica negra desde Puente Grande” narra que a la víctima le ordena bañarse a conciencia, le daba una botella de whisky y lo mandaba desestresar para luego ejecutarlo rápidamente de forma que no liberara adrenalina y “la carne no se ponga amarga ni dura”. Luego se preparaba en tamales, tostadas, pozole o incluso cocida con limón como si fuese carne tártara.
El canibalismo ya no es una prueba de lealtad sino un acto que sirve para celebrar una alianza
No solo eso, sino que en una ocasión, tres centroamericanos que le habían robado un camión de cocaína fueron capturados por su grupo, ejecutados y preparados en un festín que luego se sirvió en una posada navideña del que todo un grupo participó. Lomnitz cuenta: “Los comensales pueden saber e ignorar lo que están comiendo […] el canibalismo ya no es una prueba de lealtad que requiera sometimiento abyecto al jefe sino un acto que sirve para celebrar una alianza”. Para Lomnitz “Ya no se usa un órgano, sino que se usa carne con criterio de carnicero […] el asesinato queda entonces como un componente del lujo que se despliega en un convivio”.
En medio de la polémica por el descubrimiento de los cuerpos refrigerados, la aparición de un video de tortura a unos jóvenes en Lagos de Moreno, Jalisco, y una clase política que ha optado por ignorar la violencia y volcarse en la sucesión presidencial de 2024; la pregunta sobre “¿por qué refrigerados?” fue una sacudida en México. Como historia de terror contemporánea, estos macabros actos han ensombrecido el complicado panorama que se vive en el México actual.
https://www.espaciomisterio.com/creencias/narcocanibalismo-nuevo-terror-en-mexico_58259
Nuestro mundo está muy enfermo !
los indigenistas estan en pleno retroceso en su patologia mental revindicando a Montezuma, solo les falta retomar las practicas de canibalismo de hace 500 años