Cuatro reflexiones que fortalecen tu intención de practicar

Si contemplas estas contemplaciones tradicionales, las “cuatro grandes reflexiones”, fortalecerás tu intención de practicar.

Normando Fischer
Estatua de la deidad tara.
La deidad Tara. Foto cortesía de la Fundación Norton Simon.

Cada vez que nos sentamos a meditar, cada vez que dirigimos la mente hacia pensamientos y acciones positivas para beneficiar a los demás, estamos fortaleciendo nuestra intención, nuestro compromiso y nuestro voto de practicar continuamente, momento tras momento, para siempre.

Las “cuatro grandes reflexiones” son una meditación tradicional para desarrollar la intención. Es el primero de los cincuenta y nueve lemas de entrenamiento mental ( lojong ) del budismo indotibetano. Se llama “Resolver comenzar”, porque si contemplas estas cuatro grandes verdades de la vida fortalecerás tu intención de practicar.

1. La rareza y preciosidad de una vida humana.

Piénsalo: naciste en este mundo colorido con otras personas. Tienes todo lo que necesitas. Te cuidaron y cuidaron con amor. Puedes ver, oír, saborear, tocar, oler y pensar. Puedes amar y ser amado. Tu alma puede conocer la belleza. Este es un regalo incomparable.

Detente y respira unas cuantas veces para contemplar el don de la vida humana que has recibido…

2. La muerte es inevitable e impredecible.

Nadie puede escapar de la muerte y nadie sabe cuándo llegará. Llega de noche, de mañana, de tarde o de noche. Llega en casa o fuera de ella. Puedes morir esta noche, dentro de una semana, dentro de un mes, dentro de un año, dentro de una década.

La vida es breve. Nadie sabe cuánto durará. Mueren niños, mueren jóvenes, mueren ancianos. Cada día, millones de personas dejan esta vida. Un día, no sabes cuándo, te tocará a ti.

Detente y respira un rato para contemplar esto…

3. El sufrimiento es inevitable.

Nadie escapa al dolor: dolor físico, pérdida, deshonra, falta de respeto, soledad, ansiedad, pánico, estrés, miedo. Ni siquiera los más afortunados entre nosotros escapan. Hoy en día dividimos el mundo entre los privilegiados y los que no lo son. Pero en el budismo reconocemos que todos los seres que nacen en este mundo sufren. Esta es nuestra condición básica.

Detente y respira un rato para contemplar esto…

4. El poder indeleble de todas nuestras acciones.

A lo largo de nuestra vida y en el momento de la muerte, lo único que realmente tenemos es el poder de nuestros pensamientos, palabras y acciones. Estos pueden ser aliados y protectores, o pueden hacernos la vida imposible.

Todo depende de cómo nos comportemos. Al final, no podemos depender de nuestro cuerpo, de nuestra riqueza o de nuestra inteligencia, ni siquiera de nuestras relaciones. Nadie puede acompañarnos en nuestro viaje final. Pero las palabras, los pensamientos y los actos de toda una vida darán forma al camino que recorreremos.

Detente y tómate unos minutos para contemplar esto…

https://www.lionsroar.com/four-reflections-that-strengthen-your-intention-to-practice/

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.