Estados Unidos no descarta la posibilidad de una intervención militar en Siria, informó este martes la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland.

EE. UU. confirmó su intención de conseguir que se intensifique la presión internacional sobre el Gobierno sirio y personalmente sobre Bashar al Assad con el fin de forzar su destitución. Para alcanzar este objetivo, el país norteamericano admite la posibilidad de emprender acciones militares en el territorio sirio.

“Nuestra posición ha cambiado muy poco. Creemos que una solución política es la mejor para Siria. Y si Al Assad responde adecuadamente a la presión por parte de la comunidad mundial, existe todavía la oportunidad de transferir el poder pacíficamente a otras manos, como propuso la Liga Árabe”, afirmó Nuland.

Sin embargo, la portavoz del Departamento destacó que “si no es posible hacer que Al Assad se someta a la presión, se considerarán medidas adicionales”. No descartó la posibilidad de que los soldados estadounidenses entren en territorio sirio, ni la de armar a los rebeldes para ayudarles en su lucha.

Mientras tanto, Rusia se ha pronunciado en repetidas ocasiones por el respeto a la autonomía absoluta de la política interior de Siria bloqueando las sanciones propuestas por algunos países en el seno de la ONU. Primero en octubre del año pasado y luego a principios de febrero de este año Rusia y China no permitieron la aprobación de las resoluciones sobre Siria en el Consejo de Seguridad de la ONU, usando su derecho de veto.

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