Rajoy prefiere convertir el canon en reclamo electoral antes que forzar su supresión. Con este titular resumía Nación Red la “confidencia” que le hacía Rajoy al diario El Mundo y que éste convertía en gran promesa electoral para ver si entre los dos conseguían sacar del barrizal digital a la derecha por su apoyo parlamentario a la denostada Ley Sinde que justamente llamaremos la Ley Sinde de Rajoy.
Lo bochornoso del asunto es que el PP se había “tragado” su propia enmienda anticanon a la Ley Sinde en la negociación con el gobierno. Aquella que decía: “El Gobierno, en el plazo de un mes desde la entrada en vigor de la presente ley, deberá remitir a las Cortes Generales un Proyecto de ley de Propiedad Intelectual en el que se aborde, entre otras cuestiones, la eliminación de la compensación equitativa por copia privada”.
A esta otra que dice: “El Gobierno, en el plazo de tres meses desde la entrada en vigor de la presente ley, mediante real decreto y con plena conformidad al marco normativo y jurisprudencial de la Unión Europea, procederá a modificar la regulación de la compensación equitativa por copia privada”.
De un mes y eliminación a tres meses y modificación. Así negoció el PP. Ni apoyando la Ley Sinde fue el PP capaz de defender como contrapartida la supresión del canon. De defender su propia enmienda. Ahora vuelve con su promesa electoral (pdf). Mañana la presentará formalmente en el Congreso de los Diputados. Pero se hace pública en el Congreso de las “Juventudes del PP”. Porque Rajoy cree que estos asuntos del internet son sobre todo de “adolescentes” y porque había que tapar las duras críticas que en el Congreso de NN.GG se hicieron a la Ley Sinde.
Rajoy es un político de antes de Google. No hay otro “líder” que esté más alejado de la generación red. Lo compensa con un equipo muy atento a lo que pasa (y está pasando) en internet y en las encuestas. Ellos le ha recomendado a Mariano sacar otra vez de la chistera electoral lo de suprimir el canon, aunque hasta el 6 de junio no se cumplirán los tres meses pactados con el PSOE y CiU para alcanzar un acuerdo sobre el mismo.
En campaña manda el titular y la urgencia en taponar la veta por la que se pueden escapar los votos de la libertad digital que el PP de Rajoy quiere cercernar con su apoyo a la ley Sinde (o al ACTA) y su pacto del miedo con los editores, productores y lobbystas.
España no puede seguir con un Gobierno que “la gente se toma a chirigota”, dijo ayer en Zaragoza el líder de la oposición conservadora. Solemnemente.