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» Te advierto, quien quiera que fueres, ¡Oh! tú que deseas sondear los Arcanos de la Naturaleza, que si no hallas dentro de ti mismo aquello que buscas, tampoco podrás hallarlo fuera. En ti se halla oculto el tesoro de los tesoros…
¡Oh! hombre, conócete a ti mismo y conocerás al Universo y a los Dioses«
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4.500 años ha esperado este texto en el frontis del templo de Apolo de Delfos para desvelarnos su secreto. Muchos antes, una contracción de este texto deslumbró a los grandes pensadores como Sócrates, Heráclito, Quilón de Esparta, Tales de Mileto, Sócrates, Pitágoras, Solón de Atenas:
«Conócete a ti mismo»
<<<<< Aquí, el oráculo de Delfos comunicaba con los dioses en la Grecia antigua
La frase se atribuye en ocasiones -erróneamente- a Sócrates, pero él ya la conoció de sus antepasados, transmitida quizás por los propios dioses a través del Oráculo de Delfos (*), uno de los más importantes de la antigüedad. Dioses que ya sabemos que no eran más que un sincretismo de los dioses sumerio-anunnakis, cuya longevidad les ha hecho transversales a todas las civilizaciones de la historia.
(*) Oráculo es el mensaje que daban los pitonisos y sacerdotes (los primeros delegados del poder divino o capataces) en nombre de los dioses. Por extensión, también se llama así al lugar sagrado donde se acudía para consultar a los dioses.
«Conócete a ti mismo» ya es de por si una frase tan sugerente como breve, pero si es observada en el contexto de un oráculo, que la recibe directa de los dioses, se abre un nuevo significadode mucho más alcance: Averigua sobre tí mismo, sobre tu cuerpo y tu mente y conocerás la historia, conocerás el Universo y conocerás sobre nosotros los dioses, que de hecho es la frase completa grabada en Delfos:
«Conócete a ti mismo y conocerás al Universo y a los Dioses»
No pretendemos estar a la altura de Sócrates y sus colegas, ni de las pitonisas de Delfos pero recogemos el desafío de los diositos y lo estamos dando todo para que su mensaje encriptado se les vuelva en contra y les estalle en su «divina» cara. Eso sí, con toda modestia, nosotros lo mejoramos porque le añadimos otra gran frase, también en su versión completa (Juan 8:32)
«y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres»
otra gran frase que no ha perdido valor a pesar de su banalización.
Entonces, proponemos esta fusión:
«Conócete a ti mismo, conocerás a los dioses y conocerás la Verdad,
y la Verdad te hará libre
Aunque esta frase tan completita también tiene otra lectura:
«No busques siempre fuera la solución, pues está dentro de ti»,donde «fuera» representa a una extensa colección de libros, cursos, técnicas espirituales, amuletos, gurús, adivinos, terapias revolucionarias, etc
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En los dos artículos anteriores hemos conocido los diferentes algoritmos -disonancias y sesgos- que los dioses programaron en nuestro cerebro, para perpetuarse en su olimpo divino sin que los humanos inferiores pudiéramos ascender a él. Quedan aún más intervenciones sobre nuestra raza a las que posiblemente aludían los dioses en su mensaje de Delfos y los iremos desvelando en el resto de artículos, pero en esta entrega nos vamos a dedicar a conocer cómo de importante puede llegar a ser la sentencia favorita de Sócrates.
«Conócete a ti mismo», porque si tú no lo haces, vendrá alguien que te conoce más que tú y podrá jugar contigo como el ventrílocuo hace con sus muñecos. Quizás los sacerdotes de Delfos quisieran avisarnos… o amenazarnos.
Como moldearon nuestro cerebro
Si quieres conocerte a ti mismo… debes antes conocer tu mente, sobre todo si eres de «los que confunden lo que piensan con lo que son«. Todos los grandes magos e ilusionistas conocen tu mente a la perfección y eso les permite engañarte a voluntad, pero ahora vamos a desvelar su verdadero secreto…todos sus trucos, manipulaciones y engaños ocurren primero en tu mente.
A continuación descubriremos que sus palabras mágicas no son del tipo » Abracadabra«, sinó mucho más simples y cotidianas. «El Mago» sólo necesita pronunciar estas dos palabras«Atención» y «Continuidad» para construir todas sus trucos y manipulaciones…
1 ·La ecuación de la Ansiedad
2 ·El arte de la Atención
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1·La ecuación de la Ansiedad
Los grandes ilusionistas nos engañan con tanta facilidad porque conocen bien las debilidades de nuestra mente y porque son expertos manipuladores de la atención. Su éxito radica simplemente en saber dirigir nuestra atención lejos de donde están efectuando sus trucos. No es que su mano sea más rápida que nuestra vista, sinó que sabe cómo funciona nuestro cerebro y sabe cómo ocultarle las cosas. No es nuestra vista la que falla, sinó la mente y es que un mago posiblemente sabe más sobre su funcionamiento que muchos psiquiatras y neurocirujanos.
<<<<< La facilidad con la que se engaña nuestra percepción se puede traspolar en general a toda cognición.
Manipular es fácil, si se sabe cómo…
Por lo general, lo que no vemos no existe, aunque hay muchas cosas que nosotros «sabemos» sin que el consciente haya intervenido y por tanto sin que sepamos que existen. De la misma manera que el ilusionista hace invisible su truco desviando nuestra atención, la manipulación verdadera no es la que nos induce a cambiar una opinión, sinó la que nos hace invisible partes de la realidad, mediante el método básico de alterar nuestra atención. «El Mago» hace desaparecer la Verdaddelante de nuestras narices, como la moneda desaparece de la mano del prestidigitador o del trilero. Sin embargo, los grandes manipuladores sociales tienen una herramienta extra que los ilusionistas no suelen usar en el escenario: la Ansiedad, en concreto la ecuación que relaciona la ansiedad con la conciencia.
Ansiedad
La ansiedad es una reacción emocional ante una situación que se percibe como una amenaza.
Es una reacción necesaria para sobrevivir ante ciertos riesgos, pues pone a la persona en alerta, pero cuando permanece o es desproporcionada respecto a la amenaza, puede convertirse en una patología. La ansiedad es invasiva como una mala hierba y consume muchos recursos mentales, lo que enlentece y ofusca nuestra conciencia.
Millones de personas sufren trastornos de ansiedad en todo el mundo, según los expertos el 25% de la población en los países desarrollados los experimentaráen algún momento de su vida. Los síntomas son múltiples y algunos pueden resultar incapacitantes o condicionar mucho la vida de las personas: inquietud, excitación, inseguridad, taquicardia, miedo, mareos, sudoración, apatía, conmoción, nerviosismo y la angustia, que comparte la misma raíz etimológica indoeuropea que la ansiedad, el «angh».
Ecuación de la Ansiedad:
«La Ansiedad es inversamente proporcional a la Conciencia»
La ansiedad es el aceite que permite que la maquinaria de la manipulación funcione perfectamente, con sigilo y gran eficacia. La ansiedad dispara el mecanismo de defensa de las endorfinas neurotransmisores opioides de efecto analgésico y generadoras de bienestar y tranquilidad, que contrarestan los síntomas anteriores. Estas endorfinas disminuyen la atención y consecuentemente disminuyen la conciencia y en casos extremos de tanto atenuarla, pueden incluso llegar a bloquear la atención.
Sin querer justificar el comportamiento de nadie, esta es una buena explicación a la actitud de esas personas a las que frecuentemente se la tilda de borregos, alienados o dormidos. Nadie insulta a los espectadores de un espectáculo de magia,gente que ha pagado por dejarse engañar y disfruta con ello, por lo que no me parece correcto que si se pueda insultar a aquellos que no han querido ser engañados ni saben que lo están siendo. Al fin y al cabo, engañados somos todos, en niveles diferentes eso si. Nuestro cerebro nos hace a todos iguales ante la manipulación, aunque la experiencia personal de cada uno diferenciará los resultados.
Esta relación directa e inversa entre sufrimiento y atención es el firme pilar en que se se sustenta la manipulación masiva -universal- en nuestro castigado mundo. Cuanto más sube la ansiedad en nosotros, más baja la conciencia por un inteligente mecanismo de supervivencia, por el que nuestro cerebro enmascara y alivia nuestro dolor sacrificando conciencia mediante la liberación de opiáceos llamados endorfinas, que mitigan el dolor pero adormecen la atención, que es el paso previo a la conciencia.
<<<< La Ansiedad es inversamente proporcional a la Conciencia
La ansiedad es una alerta biológica ante una amenaza que mediante la secreción de endorfinas dispara en nuestro cuerpo tres mecanismos muy valiosos en caso de una lucha cuerpo a cuerpo: calma, insensibilidad al dolor y una disminución de atención ya queda reducida sólo al origen de la amenaza, desatendiendo el resto de elementos de la escena.
Los opioides amortiguan el dolor y ofrecen alivio, pero decrecen la atención de la misma manera que otros neurotransmisores llamados ACTHA (Hormona Adrenocorticotrópica) tienen el efecto contrario, es decir aumentan la atención pero sensibilizan al dolor. Ambas sustancias se liberan al mismo tiempo, pero la adrenocorticotrópica actúa de inmediato, ya que su misión es afrontar un peligro, por ejemplo el ataque de un animal salvaje, incrementando la atención. En cambio, el efecto de las endorfinas es más lento, como preparando a la persona para cuando el peligro haya pasado, pero permanecen posibles heridas dolorosas.
Cuando un antepasado cazador nuestro se enfrentaba a una fiera, necesitaba focalizar su atención en el animal -por el ACTHA– y al mismo tiempo debía de sentir poco el dolor -por las endorfinas- ya que de haber puesto la atención en sus heridas ya estaría muerto. Es ese «efecto» que Holywood retrata una y otra vez, aunque exagerado hasta la caricatura, el del héroe que sigue luchando hasta la victoria a pesar de las tres fechas que lleva clavadas en la espalda, el cuchillo del muslo y el hacha del hombro.
<<<<<< La estrategia de este cóctel químico es muy buena. Al aliviar el dolor y mitigar la atención se evita que reaccionemos ante un lobo hambriento, de la misma manera que cuando nos hacemos un pequeño corte en la cocina. Eones después el lobo es una especie en exintinción y el hombre ha sobrepoblado el planeta.
Hace miles de años el hombre vivía bajo la amenaza de las fieras salvajes, la ansiedad y un buen palo eran su principal defensa. Estuvo bien, millones de Neandertales le deben la vida a esta estrategia, pero las cosas han cambiado mucho desde entonces. Hoy en día las amenazas no suelen ser del tipo«tropezarse con una fiera salvaje volviendo del trabajo». Antes, el problema del lobo tenía una duración determinada y se acababa con la huida o la muerte (del hombre o del lobo), pero ahora los problemas que hoy percibimos como amenaza se llaman despido, divorcio, multa o enfermedad y, desgraciadamente, suelen ser duraderos en el tiempo. Huir o lanzar flechas no suele arreglar las cosas y la posibilidad de matar a tu jefe queda descartada. La amenaza permanece y la ansiedad se hace persistente y acaba siendo somatizada en todo tipo de trastornos físicos y mentales.
Hoy día, la «Ecuación de la Ansiedad» ha dejado de ser un mecanismo de supervivencia para convertirse en una carga que nos obliga a estar constantemente malgastando atención y conciencia para aliviar la ansiedad que nos amenaza -y que no cesa- Y así nos convertimos en terreno abonado para las manipulaciones de «El Mago». Ir gastando conciencia, como si se tratara de un bien ilimitado y de poco valor, es facilitarle mucho las cosas y otorgarle total impunidad, ya que sus trucos quedan fuera del alcance de nuestra atención y conciencia mermadas.
Hoy quien nos acecha no es el lobo, es «El Mago».
Dado que de la atención depende la conciencia (la atención es la que abre paso hacia el consciente y permite «darnos cuenta de las cosas«) cabe decir que la ansiedad, y el sufrimiento que nos genera, nos cuesta a los humanos un bien muy preciado. Pagamos el sufrimiento con conciencia, por eso vivimos en un mundo orientado a crear sufrimiento de todas las maneras imaginables. Por esta ecuación, los antiguos dioses sumerio anunnakis diseñaron una sociedad alrededor del miedo, el hambre, el abuso, la enfermedad, la ignorancia, la guerra, la religión, la crisis … todo en nuestra sociedad parece haber sido pensado para mantenernos atados a la ansiedad. Humanos irritados, preocupados, fatigados, nerviosos, angustiados, enfermos… humanos con la conciencia mermada, según la dichosa ecuación. Carne de cañón para los manipuladores.
Me imagino los manuales de trabajo de los amos oscuros y sus sirvientes abriendo con esta cita: «Si quieres impedir que los humanos despierten, sólo envíales mucho sufrimiento»
Es muy importante tener en cuenta que la «Ecuación de la Ansiedad» es válida en lo individual
pero también lo es en lo colectivo y a todos los niveles cognitivos.
Defenderse de la «Ecuación de la Ansiedad»
En la sociedad actual las amenazas permanecen, la ansiedad se pega a nosotros y lo acabamos pagando con atención y conciencia. Pero eso no es todo, el ser humano ha desplegado multitud de mecanismos de defensa, un amplio abanico de estrategias que en psicoanálisis se llaman resistencias o defensas (los mecanismos de defensa de Sigmund Freud que fué quien primero descubrió la relación entre ansiedad y atención). Casi todos se basan en disminuir nuestra atención y conciencia, ya que intuitivamente conocemos la ecuación, es decir que los mecanismo de defensa acaban redundado aún más en el déficit de conciencia. En casos extremos, zonas enteras de nuestra conciencia que sean proclives a crearnos ansiedad acaban convirtiéndose en puntos ciegos como medida preventiva,
Estas estrategias son un buen alivio a corto plazo, pero provocan que la persona deje de registrar mucha información valiosa, hasta tal punto que se pueden dejar de reconocer eventos completos, como si no hubieran existido jamás. Esta es una las principales razones por las que personas suelen repetir hasta la saciedad ciertos comportamientos, esos que están en la zona de penumbra y que impiden a la persona tomar conciencia del problema o del error, que por otro lado, todos los demás si ven. No hace falta estudiar psicología, el refranero popular sabe desde hace mucho tiempo lo que acabamos de afirmar:
«El hombre es el único animal capaz de tropezar dos veces con la misma piedra»
«Tropezar no es malo, encariñarse con la piedra, sí»
Este borrado defensivo nos suele arrojar a un bucle sin final que llena las consultas de los psicólogos clínicos y los bolsillos de los fabricantes de ansiolíticos y antidepresivos. Los psicólogos afrontan numerosos casos de personas que, para protegerse, han borrado completamente de su mente consciente (que no de su memoria o su subconsciente) un hecho traumático. De hecho, todo el psicoanálisis se basa en descubrir y conseguir traspasar los mecanismos fuertemente implantados que están impidiendo que la persona sea consciente de sus problemas y no tanto en solucionarlos.
Negación y autoEngaño
Los diferentes mecanismos de desenfoque de la atención/conciencia en defensa ante la ansiedad y el sufrimiento suelen basarse en la Negación y el Autoengaño. La estrategia es enmascarar elementos potencialmente peligrosos para nuestro bienestar emocionalcreando zonas de penumbra en nuestra conciencia.
Para entenderlo, recurrimos de nuevo al mendigo de nuestras calles. Alrededor suyo, se puede observar fácilmente una zona de un radio de unos cinco metros donde, cual Triángulo de las Bermudas, nuestra atención se polariza dejando fuera de foco una zona de la escena, la del mendigo claro. El fenómeno puede llegar incluso a hacer desaparecer el indigente de nuestra realidad, o al menos le quita tanta fuerza que su imagen se desechará por el camino antes de llegar a penetrar a la conciencia o a la memoria, manteniendo a salvo nuestro bienestar emocional.
<<<<< Nuestro cerbero, metido a ilusionista hace desaparecer al mendigo…
Jugando con nuestra atención podemos hacer desaparecer a mendigos en la calle, pero también muchas otras cosas incómodas de nuestra vida con la facilidad con que el ilusionista borra sus palomas blancas del escenario. El problemano es solo que desaparecen de nuestra vista sino que dejan de existir completamente, ya que no llegan a incidir en nuestra conciencia ni sabemos que su desaparición ha sido autoprovocada.
Curiosamente, nuestra civilización ha eliminado los puntos ciegos de los automóviles con cámaras de vídeo traseras y sofisticados sistemas de alerta de colisión, pero al mismo tiempo promueve los mismos puntos ciegos en la mente de las personas,para alegría del ilustre colegio de Psiquiatría, que ve como las sesiones facturadas por sus afiliados no paran de crecer.
<<<<<< Si las personas no albergaran estos puntos ciegos en su vida, los libros de psicoanálisis en vez de tener cientos de páginas podrían ser meros folletos impresos a una sola cara
Por otro lado, gran parte de lo que sufrimos por la falta de atención, negación u olvido que provoca la ansiedad perpetua nacida en nuestro propio cerebro, podría evitarse si los sentimientos estuvieran en el corazón, su lugar natural, en vez de haber sido incluidos en los quehaceres del cerebro y haber tenido que falsear el funcionamiento de la mente humana, como explicaremos con la última manipulación de nuestra mente,el «Cerebro Emocional».
El autoengaño funciona igual en lo individual que en lo colectivo.
Pertenecer a un grupo significa asumir los autoengaños colectivos y anular nuestras propias opiniones al respecto. Se disminuye la atención, se fragmenta la conciencia y dejamos de percibir muchas cosas, las mismas que nuestros compañeros. Percibir es seleccionar y por tanto implica desechar.
<<<<< Abusos sexuales en la Iglesia: todos lo sabían, pero lo pusieron en la zona de penumbra de la conciencia y el problema dejó de serlo
Quien decide qué se desecha y qué no son los filtros de nuestra mente, de los que hablaremos en los próximos artículos, porqueson el punto más propicio de manipulación, junto con los algoritmos con que se gestiona la información (ver El Mago, la manipulación invisible 2º) debidamente intervenidos por aquellos a los que encima les calificamos como dioses.
Adicciones
Por instinto, las personas conocemos la «Ecuación de la Ansiedad» y la aplicamos para mitigar el castigo de la ansiedad perenne. Hemos visto que usamos métodos psicológicos para disminuir la atención y la conciencia pero hay otros métodos materiales como tomarnos una copa, un porrito o un ansiolítico. Cualquier método es bueno si consigue el alivio de disminuir/alterar nuestra atención.
<<<< Alijo de «Trankimacin», el medicamento estrella contra la ansiedad, intervenido por la Policía en España
Lo que estamos haciendo al «beber hasta perder la conciencia» es aplicar intuitivamente la «Ecuación de la Ansiedad», que relaciona la Ansiedad y la Atención/Conciencia. Este es el secreto de todas las drogas cuando son mal usadas (*), desde las más adictivas hasta las más inocuas. Las drogas alteran la percepción de la realidad momentáneamente pero no la cambian, por lo que la fuente de ansiedad sigue presente una vez que su efecto se acaba.
(*) Esto no es válido en el caso de sustancias que afectan la conciencia potenciándola, no disminuyéndola como el alcohol. Algunas, como la ayahuasca o el LSD expanden la conciencia porque sus sustancias activas reactivan nuestra pineal y pueden ser un gran camino de desarrollo personal, altamente recomendable. Lo explicaremos en el artículo nº seis de esta serie.
Cuando el efecto paliativo de las drogas finaliza, la ansiedad permanece pero agravada por el efecto adictivo que genera más ansiedad sinó es saciado, lo que nos arroja a un pegajoso bucle, como en el caso del Trankimacin. Por si fuera poco, el efecto adictivofrecuentemente está potenciado por la actuación de una gran mayoría de los códigos 666 que han sido programados con esta intención ver «Los codigos 666 y la quinta dimensión del amor«
<<<<< Ponerse ciego es ponerse «ciego de atención» y es lo más cerca de aquietar la mente que han estado muchas personas, por eso gusta tanto
Otra forma de «perder la conciencia», mejor dicho de perder la atención aún que casi son lo mismo, es otro fenómeno moderno cuyas cifras de incidencia suben como la espuma entre la población. En casos graves, sus consecuencias son altamente inhabilitantes aunque no se le esté dando la importancia social que merece. Estoy hablando de una actividad que captura y monopoliza la atención como ninguna otra y que es muy aditiva a nivel psicológico y a nivel químico, aunque sea con químicos segregados por el propio organismo. Estoy hablando de la pornografía.
2 ·El arte de la Atención
La atención es una de las palabras más importantes de todo nuestro vocabulario.
Aprendemos las primeras cosas de nuestra vida compartiendo la atención con nuestros padres. Cosas que ya no olvidaremos nunca, como el lenguaje materno o la interacción energética con el entorno. Focalizar la atención y mantener el control sobre ella es primordial para nuestra vida social y nuestra salud mental, hasta tal punto que el descontrol de la atención está detrás de muchos trastornos psicológicos importantes como la esquizofrenia, basada en un desorden caótico de la atención, o el autismo, basado en la incapacidad de enfocar y sostener la atención. Sé por la experiencia de haber convivido con una persona esquizofrénica que una simple noticia que capte la atención emocional -o una copa que la relaje, puede disparar una fuerte crisis.
La atención es un bien limitado, y gestionarla correctamente no es fácil. La sabia gestión de la atención es la clave del éxito en una toma de decisiones, mientras que una atención sesgada por algoritmos malintencionados, sensibles amanipulaciones externas, es garantía de alienación.
<<<< atención a la «Atención»
Donde ponemos la atención, ponemos la conciencia, y donde los seres que vibran en el Amor ponen su conciencia automáticamente proyectan su Amor. Por el contrario,apartar nuestra atención es el principio del fin. Por ejemplo, cuando apartamos la atención de nuestra pareja es que ha llegado el momento de empezar a buscar un abogado matrimonialista. De la misma manera, si apartamos la atención de nuestras intuiciones (la información que llega de la red mental del corazón) éstas dejaran de tener importancia, hasta llegar a desaparecer (fenómeno muy común llamado «no hacerse caso a si mismo»). En cambio, si ponemos la atención en ellas, las intuiciones pueden ser racionalizadas y enriquecidas con nuevos datos, reconvirtiéndose a pensamientos conscientes.
ILUminattis-ILUsionistas, maestros de la atención
Cuanto más atención ponemos en un punto, más información suprimimos en el resto, una ecuación que usa constantemente «El mago», sea en un escenario o en un medio de comunicación. Cuanta más atención ponemos en la mano del ilusionista, más «desaparace» de nuestra cognición lo que está haciendo su otra mano libre. Sin ir más lejos, todos hemos experimentado como el resto del mundo parece desaparecer de nuestro alrededorcuando estamos inmersos en tareas muy especializadas.
La atención se concentra en un punto porque un grupo de neuronassuprimen la percepción de las regiones periféricas, y por tanto, la atención«toca más a repartir», pero con el efecto secundario de que se debilita la percepción en el área circundante, algo muy evidente a nivel visual pero que hay que extrapolar a todo el sistema cognitivo. Los ilusionistasaprovechan esta capacidad de focalizar/restringir la atención para, por ejemplo, hacer que su ayudante salga del baúl sin que la veamos o para que los planes de los que gobiernan detrás de las cortinas permanezcan invisiblespara todos los cuidadanos. Hablando de cortinas, a desviar la atención de le llama correr una cortina de humo…
«El Mago» no sólo se preocupa en dirigir la atención según le conviene, también le gusta fragmentarla, proponiéndole multitud de focos donde dirigirla. De esta forma, puede conseguir colapsarla con facilidad. La atención literalmente no da abasto y buena parte del resto de eventos queda «desatentido», momento que aprovecha para hacer con nosotros literalmente lo que quiera, sea quitarnos el reloj y la cartera o colocarnos un ridículo gorro mientras los espectadores ríen a carcajadas. En otras circunstancias también puede conseguir que nos creamos una noticia falsa o que compremos un determinado producto, cosas de «El Mago».
Ruido mental
Los ilusionistas utilizan múltiples técnicas para conseguir fragmentar/dispersar la atención de las víctimas de sus engaños, una de las más usadas es generar mucho ruido mental. Cuando el prestidigitador se dispone a quitarnos el reloj de la muñeca sin que lo adviertamos nos atiborra a preguntas, chistes, comentarios, nos está saturando para que nuestra atención colapse y sus dedos puedan trabajar sin ser descubiertos. Cuando el ruido mental nos supera somos presa fácil de la manipulación. Por ello los medios de comunicación, los smartphones, internet, televisión nos saturan, y literalmente secuestran nuestra codiciada atención.
<<<<<< Dispersar la atención es perjudicial, lo sabemos desde siempre, no en vano ponemos ojeras a los caballos desde tiempos remotos. Por el contrario, concentrarla en un punto incrementa la calidad de la visión y de la cognición.
A nivel colectivo, en lo social, ocurre exactamente lo mismo. La Atención es la verdadera varita mágica de los ilusionistas en el escenario y de «El Mago» en el mundo real. En este sentido, la Conspiranoia, a la que dedicamos la siguiente entrega de esta serie, resulta muy útil para desviar la atención de los que tienen más conciencia. Las personas que saben que detrás de las cortinas hay alguien y que están muy pendientes por si asoman unos pies por debajo son objetivo prioritario para «El Mago», como es lógico. Conspiranoia y atención van de la mano, por ejemplo, para generar «ruido» que fragmente la atención, como acabamos de explicar. Cuando un mago juega a quitarnos el reloj sin que nos demos cuenta, suele bombardearnos con todo tipo de preguntas, comentarios y bromas que generan en nosotros un diálogo interno muy distractivo y que roba gran parte de la atención que teníamos disponible. Es exactamente la misma función delbombardeo de datos e interpretaciones dispares (y disparatadas) que miles de webs conspiranoicos descargan sobre cualquier foco de atención que el sistema nos haya señalado previamente con su láser apuntador. Por tanto, ahí va un consejo al acabar de leer cualquier blog, tócate la muñeca no sea que tu reloj ya no esté.
Por este mismo objetivo trabajan también los integrantes de esa nueva profesión tan ligada a la Conspiranoia: los Desinformadores.
Personajes como Sorcha Faal, Benjamín Fulford y muchos más, así como sus portavoces «copia-y-pega» en lengua castellana, que no voy a citar por «ética profesional», pero que nos atiborran con predicciones, conspiraciones, misterios y todo tipo de pirámides esparcidas por el sistema solar. Como ya hemos dicho, alguna de sus informaciones son verdades, unas cuantas más son medias verdades y la gran mayoría son ruido y confusión. La mejor manera de esconder una aguja no es enterrándola es un pajar, sino guardándola dentro de una cajita de muchas agujas. De igual manera, esconder una verdad entre miles de falsas verdades es la mejor manera de esconderla. Para cuando la Verdad salga a la Luz, que ya está empezando a hacerlo, ya nadie será capaz de encontrarla ni de reconocerla.
Todos estos agentes saturadores son los ayudantes de «El Mago», los que preparan a los espectadores y los elementos del escenariopara que el truco -la manipulación y la mentira- sea un éxito
La mera existencia de un grupo ficticio llamado «Illuminatti» (*), en el que se basan casi todas las teorías de la conspiración, es ya un truco de ilusionismo, qué casualidad que compartan el prefijo «ILU«. La palabra ilusión viene del latín illusio, que significa «engaño» y del verbo illúdere que significa «burlarse de»,que es exactamente lo que hacen ellos escondidos detrás de sus cortinas de terciopelo. Mientras nuestra atención está centrada en los inexistentes Illuminatti, los verdaderos manipuladores permanecen en la zona periférica de nuestra cognición, es decir permanecen invisibles… ¡ La Conspiración funciona ¡
(*) Como grupo cerrado real, los «Illuminattis» son una ficción, aunque como concepto de «élites que manejan el mundo» sí son una realidad, aunque nosotros preferimos llamarles «Capataces» (ver más sobreIlluminattis o sobre capataces). Se les llame como se les llame, los que ostentan el poder en la sombra son unos grandes ilusionistas, cuyo escenario abarca todo el planeta, por eso nos referimos a ellos como «El Mago».
Como magos son expertos encontrolar nuestra atención y dirigirla hacia donde desean, siempre en complicidad con nuestro cerebro y sin que nos demos cuenta de ello. Manipular es algo relativamente fácil para un mago prestidigitador, nos mira a los ojos, atrapa nuestra atencióny nos quita la cartera, tan fácil como el trilero de las Ramblas de Barcelona hace desparecer los billetes de 50 € del bolsillo de los turistas. Fácil como cuando el delantero de fútbol usa su mirada y su lenguaje corporal para indicar al portero donde va a tirar el penalty, para engañalo claro.
<<<<< La diferencia entre los dos tipos de ilusionistas es que unos nos engañan con nuestro permiso, en un escenario, y los otros no
Saturación mental
El ruido del mago en el escenario busca nuestra saturación mental, algo que ha acompañado al hombre en su historia, tanto a nivel individual/neuronal como cognitivo,impidiendo que podamos dedicar nuestra potente mente a otros menesteres. Estoy hablando de la religión, del deporte e incuso de la escasez y el hambre, por poner algún ejemplo, aunque no ha sido hasta el desarrollo tecnológico de nuestros días que se ha alcanzado la máxima exaltación. El trepidante ritmo cinematográfico de las series, vídeos musicales y spots televisivos actuales responde a esta misma estrategia de saturación mental y colapso de la atención. Y no sólo el ritmo, también la congestión visual en los planos.
Podríamos llegar a aceptar la sobreestimulación visual en series y videoclips, pero en un programa informativo debería estar prohibido por el código deontológico del periodismo. Sin embargo es una práctica que se está convirtiendo en habitual.
<<<<< Exceso de información visual que capta la mayor parte de la atención disponible del espectador, la noticia es lo de menos. Dividiendo la atención en diversas áreas se presta menos atención a cada una de ellas. Divide (la atención) y vencerás
Ceguera por atención
De la saturación se deriva un interesante fenómeno conocido como «Ceguera de Atención» (o de Desatención), que es «la incapacidad de una persona de captar un estímulo inesperado mientras está realizando una tarea en la que presta atención». Es fácil provocarla mediante la estratagema de sobresaturar a la persona con multitud de estímulos o con el efecto deslumbrador de algún evento impresionante, como el derribo de unas torres gemelas o como cuando miramos directamente el disparo de un flash y por unos instantes perdemos completamente la visión.
La «Ceguera de Atención» por sobresaturación tiene su máximo exponente en la famosa plaza neoyorquina de Times Square y sus cientos de hipnóticos paneles luminosos que ocupan todo el horizonte visual hasta varios pisos de altura. Quién haya estado allí entenderá fácilmente el experimento de atención del que estoy hablando.
<<<<< Times Square en Nueva York, toda una experiencia «experimental»
Los miles de paseantes diaros de Times Square le convierten enuno de los experimentos con más participantes de la historia científica, claro que no está homologado por ninguna universidad. El experimento académico más conocido en cuanto a atención es el realizado en 1999, por Simons and Chabbris, y queperiódicamente se hace viral en Internet. En él se pedía a un grupo de personas que observasen atentamente un partido de baloncesto y contasen el número de veces que los jugadores con camiseta blanca se pasaban la pelota entre sí.
Entre los jugadores se movía un gorila disfrazado que muchas personas no lograban ver,ya que su atención estaba literalmente secuestrada por los pases de balón. Si el gorila pasa desapercibido no es por un defecto visual, sinó consecuencia de la «Ceguera por Atención» que se da en todos los niveles cognitivos y que es uno de los habituales mecanismos de manipulación social.
<<<<<< El ilusionista sabe como hacer desaparecer gorilas, pero «El Mago» sabe hacer desaparecer cosas bastante más sofisticadas
El cine es otra fuente constante de experimentos, aunque no siempre malintencionados. Los pequeños cambios de… seguir leyendo
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