«Hemos sido diseñados. Entonces la pregunta es, ¿por qué?»
KLAUS El mes pasado, las noticias sobre el primer ser humano que recibió con éxito una interfaz cerebro-ordenador (BCI) de Neuralink ocuparon los titulares de todo el mundo. A pesar de las pruebas inhumanas realizadas por la empresa con primates y de las inquietantes fotos del postoperatorio, la noticia dio esperanzas a quienes podrían beneficiarse de ella. Muchos veían la posibilidad de mejorar exponencialmente su calidad de vida a medida que esta tecnología innovadora siguiera desarrollándose en el sector privado. Seguir leyendo NUESTRAS ALMAS SINTÉTICAS