- Se debe tener en cuenta la edad, el estado de salud, si padece alergias o si es asmático el niño
Investigador del CIBO nos da algunos puntos a considerar al elegir la mascota para el hogar
«Se deben considerar factores como la edad y el estado de salud de los niños, además de tipo y temperamento de razas o especies y el espacio de la vivienda, antes de elegir una mascota, sobre todo si convivirá con los infantes», indicó.
Manifestó que se debe considerar si el niño es sano, si no tiene alergias o si es asmático, «No estaría indicado por ejemplo tener un conejo, o gato porque el pelo o restos de piel de estos animales exacerban estos cuadros», dijo el también Médico Veterinario y Zootecnista.
Expuso que en casos en que los menores padecen enfermedades que reducen las defensas como es el caso del cáncer, VIH/Sida entre otras, lo recomendable es definitivamente no tener en mascotas en el hogar.
En tanto si el niño tiene un buen estado de salud, alrededor de los tres años de edad puede convivir con algunas mascotas, lo idóneo para estas etapas es un acuario de peces siempre y cuando se mantenga limpio todos los días, explicó Portilla de Buen.
Para niños mayores de seis años de edad, dijo el experto, se puede optar por animales como perros de ciertas razas como el Poodle o el Bóxer, teniendo ciertos cuidados y medidas de higiene y se otorgue espacio suficiente a la mascota.
Resaltó que al elegir determinada raza o especie, se deben conocer los términos en que se dio la cruza y crianza para identificar el posible temperamento que tendrá la mascota y prevenir alguna eventual agresión sobre todo hacia los más pequeños.
«Hay una raza que es el pastor alemán que bien seleccionada, debe ser muy tranquilo, muy atento, sin embargo en alguna época se hicieron muchas cruzas y esto dio como resultado que su temperamento se tornara inquieto, aquí estamos hablando de la misma raza pero criada de diferente manera», alertó.
Otro aspecto, señaló, es que se deben adquirir las mascotas en lugares regulados por autoridades sanitarias, de otra forma se corre el riesgo de que el estado de salud de estos animales no esté garantizado e incluso pueda carecer de vacunas o se encuentre enfermo, lo cual también representa riesgos.
Recomendó no dormir con la mascota, no darle besos y menos en la boca, lavarse las manos después de tocarle, desparasitarla regularmente y llevarla al veterinario de forma periódica, además de limpiar diariamente el espacio que se le asigne o en su caso jaulas o peceras.
Asimismo, dijo, no ducharle en el mismo espacio donde las personas se bañan ni compartir artículos para el aseo personal, además de mantenerla lejos de donde se preparan alimentos o se guardan, todo esto contribuye a evitar la transmisión de enfermedades de animal a humano (zoonosis).
Desde alergias, hasta parásitos y larvas, además de cuadros como conjuntivitis, cisticercosis, rabia y otros virus, salmonelosis y afectaciones gastrointestinales, leptospirosis, brucelosis entre otras patologías pueden adquirirse por falta de higiene al convivir con mascotas, incluyendo aves, reptiles y roedores, indicó el experto.
«Hay también hongos que podemos adquirir de animales, sobre todo de las heces de aves acumuladas en zonas húmedas, que pueden también derivar en infecciones», expresó.
Señaló también que la posibilidad de contraer ácaros y garrapatas es latente al convivir estrechamente con animales de no tomar medidas higiénicas. No obstante afirmó que el tener en casa mascotas bien seleccionadas, manejadas y cuidadas de forma responsable, contribuyen significativamente y de forma positiva en el desarrollo del niño.