Un cráneo de 55.000 años de antigüedad hallado en Manot cueva en el norte de Israel está arrojando luz sobre los orígenes y las migraciones de la humanidad antigua. El cráneo, sugirió a ser evidencia de un emparejamiento entre los neandertales y los humanos modernos, sería la evidencia más temprana del hombre moderno para reuniones y el apareamiento con los neandertales encontrados hasta la fecha.

Según ScienceDaily , el cráneo parcial «proporciona evidencia de que los seres humanos modernos y los neandertales habitaron el sur de Levante durante el Pleistoceno tardío, alrededor del momento en el caso probable de cruce entre los humanos modernos y los neandertales.» Esto pondría en entredicho la teoría de que dos especies conectados 10000 años más tarde en Europa.

Cráneo recién descubierto desde Manot Cave. Crédito: / Autoridad de Antigüedades de Israel Clara Amit

Al describir la importancia del hallazgo cráneo parcial en la Cueva Manot, los autores del reciente estudio publicado en la revista científica Naturaleza informe: «Es una forma similar a los últimos cráneos africanos, así como a los cráneos europeos del Paleolítico Superior, pero diferente de la mayoría de los seres humanos anatómicamente modernos temprano en el Levante. Esto sugiere que las personas en Manot podrían estar estrechamente relacionados con los primeros humanos modernos que más tarde se colonizaron con éxito Europa. Por lo tanto, las características anatómicas usadas para apoyar el «modelo de asimilación» en Europa podrían no haber sido heredado de los neandertales europeos, sino más bien de las poblaciones levantinas anteriores «.

Los restos óseos de un niño neandertal (no desde Manot). Wikimedia, ( CC BY-SA 2.0 )

Manot es una cueva prehistórica casi sellada ubicada en las colinas rocosas del oeste de Galilea, Israel, que fue descubierto en 2008 por los espeleólogos rapel a través de un techo de reciente apertura. Los desprendimientos de piedras habían bloqueado la entrada de hace 15.000 a 30.000 años. Las excavaciones desde 2010 han puesto al descubierto un tesoro de carbón, huesos, pedernal, y los artefactos arqueológicos que datan de la época del Paleolítico Superior, y han demostrado que era intensamente ocupado durante ese período, señala el sitio web de la Antigüedad . De acuerdo con informesde la Universidad Case Western Reserve (CWRU), Manot se encuentra en la «la única ruta terrestre disponible para los seres humanos antiguos para viajar fuera de África a Oriente Medio, Asia y Europa.»

Dentro Manot cueva en el norte de Israel. Las excavaciones han revelado los artefactos y un cráneo parcial que se remonta 50.000 años. Crédito: Amos Frumkin / Universidad Hebrea Centro de Investigación de Cuevas

El cráneo está faltando fragmentos que permitan a los investigadores saben el sexo del titular. Extracción de ADN de la calavera revelaría más, y sería un paso hacia la confirmación de la paternidad y de si es un antepasado de los humanos modernos, pero debido al clima cálido de la zona que es poco probable. Sin embargo, el equipo de excavación en Manot cree que hay más fósiles que se encuentran en la cueva.

La búsqueda para establecer orígenes antiguos de la humanidad continúa con la investigación emocionante como este. Combinado con los recientes descubrimientos de dientes prehistóricos y huesos de la mandíbula que se encuentran en China y Taiwán.

Mandíbula fosilizada, apodado Penghu 1, que se encuentra sumergido en fondo marino cerca de Taiwán. Datado entre hace 10.000 y 190.000 años. Crédito: Y. Kaifu, CC BY-NC-SA-4.0

Glenn Starkman, director del Instituto de la Ciencia de los Orígenes contadas CWRU, «Quiénes somos, de dónde venimos y cómo llegamos hasta aquí son las preguntas que nos han fascinado los seres humanos desde antes de que existiera la historia. Nos teje mitos maravillosos que respondieron a esas preguntas definitivamente, pero ahora vamos acumulando lentamente evidencia de un pasado lejano «.

Foto principal: Neanderthal homínido cráneo, (no desde Manot). Carolina del Norte Facultad de Ciencias y Matemáticas (NCSSM) / Flickr

Por Liz Leafloor