Cada día prueba a dibujar una sonrisa en tus labios, prueba a transmitir tu alegría a los demás, a disfrutar cada instante de la vida, repartiendo sonrisas. ¿Recuerdas cuando eras niño y jugabas en el parque? No parabas de sonreír mientras corrías, mientras jugabas con otros niños. Ahora ya no logras sonreír de esa forma, pero puedes hacer un esfuerzo por lograrlo de nuevo.
No es necesario que te sientas feliz para sonreír, simplemente sonríe, porque el poder de la sonrisa reside precisamente en cambiarte, en hacerte ver las cosas diferentes cuando la dibujas en tu rostro, cuando inclinas las esquinas de tus labios hacia arriba, tus ojos verán de otro color la vida.
“Opino que lo que se llama belleza, reside únicamente en la sonrisa”.
Los beneficios de tu sonrisa
Sonreír beneficia a tu estado de ánimo, lo que transmites a los demás será positivo, sonreír te ayuda a darte a conocer, a tener una conexión con otras personas y a mejorar cómo te sientes. Una sonrisa te hace sentir bien. Al sonreír, el cuerpo libera endorfinas y serotoninas al torrente sanguíneo, reduciendo así, los dolores y mejorando el sistema inmune y, por tanto, nuestras defensas.
Sonríe para ser feliz
Una sonrisa tiene un efecto muy positivo sobre ti mismo. Existe una vía de comunicación de doble sentido entre nuestro cuerpo y nuestro cerebro. En un sentido, cuando algo te hace sentir feliz, tu cerebro le transmite a tu cuerpo la orden de que sonrías.
En el otro sentido, es decir, si sonríes, incluso cuando no tienes ninguna razón, tu cerebro recibe esta información de los músculos de tu cara, entiende que estás sonriendo y que hay algo que te hace feliz, así que para ser congruente, tu estado emocional comienza a cambiar hacia el optimismo y la alegría.
Charles Darwin, ya habló de esta teoría y constató que si se simula una emoción, se puede provocar esa emoción en nuestra mente. Por lo tanto, independientemente de cómo te sientas, triste, alegre, decepcionado, cansado, sonríe y serás más feliz.
Sonríe para que te perdonen
Si has cometido un error, pide perdón y hazlo con una sonrisa. Cometer errores es humano, y asumir que nos hemos equivocado y pedir perdón también. Se trata de sonreír no de reír, de acompañar nuestras disculpas con una sonrisa sincera. Hay estudios que demuestran que una sonrisa nuestra sinceridad y que, por lo tanto, es más fácil perdonar a una persona que sonríe.
Sonríe para seducir
La sonrisa es una poderosa forma de seducir, al sonreír nos mostramos más cercanos, más felices, más accesibles. Si quieres conocer a alguien, que tu arma sea una sonrisa, que se dibuje en tu cara de forma sincera, para mostrar quien eres. Tanto hombres como mujeres utilizamos nuestra mejor sonrisa cuando queremos conquistar a alguien, es una forma de seducción, un elemento más que acompaña gestos y palabras.
Pero la seducción, no sólo se utiliza en las relaciones de pareja, también se puede utilizar en la vida profesional, por ejemplo, en una reunión para lograr lo que deseamos en la negociación, para mostrar nuestra empatía y alcanzar acuerdos satisfactorios.
“Una mujer puede darlo todo con su sonrisa y recuperarlo después con una lágrima.”
-Coco Chanel-
Sonríe para provocar emociones
¿Te has fijado lo que ocurre cuando le sonríes a un niño? Por lo general, te devuelve automáticamente la sonrisa. Eso ocurre también con los adultos, probablemente si le sonríes a un desconocido por la calle, te devolverá la sonrisa.
Por lo tanto, las sonrisas provocan emociones positivas en los demás. Sonreír te alegra a ti, y también a las personas que te rodena, porque envías, a través de la sonrisa, la señal de que eres sociable y cercano. Además, no lo olvides, sonreír es contagioso.
El hecho de que si sonríes te devuelvan la sonrisa, es debido al efecto de las neuronas espejo, sonríes, la otra persona sonríe y se produce un cambio emocional positivo en ti y en la otra persona.
Instrucciones para sonreír
Piensa en algo bonito, algo que te guste mucho, alguien que te emocione, dibuja una imagen en tu mente y siente esa imagen, siente lo que te provoca, cómo te emociona, y poco a poco se generará un ligero movimiento de tus labios, deja que tu boca se arquee y que tus labios muestren tus dientes, deja que tus ojos sonrían a la vez, deja que la felicidad de esa sonrisa dibujada en tu rostro te invada y que tu sonrisa se contagie.
“Fíjese que cuando sonríe se le forman unas comillas en cada extremo de la boca. Esa, su boca, es mi cita favorita”.