http://www.hispantv.com/
El Gobierno chino cree que las nuevas medidas de Japón ponen de relieve que dicho país se está preparando para una guerra contra China.
Según informó el lunes la agencia rusa Sputniknews, las autoridades chinas, tras anunciarse la intención de Japón de desarrollar un nuevo y moderno misil antibuques, sospechan que el país nipón se está preparando para librar una guerra contra China debido al tema de las islas en disputa entre las partes.
Este nuevo misil tendrá un alcance de 300 kilómetros y cubrirá las disputadas islas de Senkaku (en japonés; Diaoyu, en chino) en el mar de China Oriental que son administradas por Tokio, pero que Pekín reclama como suyas, razón por la que los chinos sospechan que el misil ha sido diseñado para hacer frente a los buques de su Armada.
Varios oficiales y expertos chinos han criticado la medida de Japón, advirtiendo que este nuevo misil pone en peligro la estabilidad y la seguridad de la región, y aumenta las probabilidades de que se produzca una gran guerra en la zona.
“Estos misiles podrían superar a los S-300 (sistemas antiaéreos) rusos en términos de cobertura. Además, los sistemas de misiles japoneses serían más avanzados que los chinos”, dijo Zhou Yongsheng, uno de los profesores del Instituto de Relaciones Internacionales en la Universidad de Asuntos Exteriores de China, quien advirtió que cuando Japón tenga en su arsenal este misil, ello significará que está preparado para atacar.
No obstante, Vladislav Shurygin, un analista militar ruso, asegura que un conflicto armado entre Japón y China por la disputa de las islas es altamente improbable, dado que no está en el interés de ninguno de los dos países participar en un conflicto de este tipo.
Además, hay mucha interacción económica entre las dos partes y parece poco probable que tanto China como Japón decidan sacrificar su prosperidad económica para obtener el control de unas islas.
Las islas en disputa, situadas en el mar de China Oriental, a unos 150 kilómetros al noreste de Taiwán, están deshabitadas. Tienen en total una superficie de unos siete kilómetros cuadrados y algunos sostienen que podrían albergar importantes recursos marinos y energéticos.
hgn/anz/rba