Estudios previos habían sugerido que el sistema nervioso desempeña un papel en la regulación del envejecimiento, pero hasta ahora no se habían podido identificar los mecanismos que sustentan esta relación.
Los resultados de este trabajo muestran que la actividad neuronal del cerebro, implicada durante mucho tiempo en trastornos que van desde la demencia hasta la epilepsia, también juegan un papel en el envejecimiento humano y la vida útil
En cuanto los animales estudiados – ratones y gusanos-, descubrieron que podían extender la vida útil de los gusanos nematodos al reducir los niveles de excitación neuronal y actividad sináptica en el cerebro usando fármacos o mediante manipulaciones genéticas. Además, el incremento de los niveles de actividad neuronal tuvo el efecto contrario.
Este hallazgo sugiere un vínculo causal entre la vida útil y los patrones de actividad neuronal. «Un aspecto intrigante de nuestros datos es que algo tan transitorio como el estado de actividad de los circuitos neuronales podría tener consecuencias tan lejanas para la fisiología y la duración de la vida», señala el autor principal.
El sistema nervioso central está repleto de neuronas excitadoras e inhibidoras que aumentan y disminuyen la actividad sináptica, respectivamente. Los autores piensan que un desequilibrio en los niveles generales de excitación e inhibición puede contribuir al proceso de envejecimiento, y destacan el papel de un factor de transcripción de mamíferos llamado REST, que amortigua la actividad neuronal.El estudio podría además servir de modelo para el diseño de nuevas terapias para afecciones que involucran hiperactividad neuronal, como la enfermedad de Alzheimer y el trastorno bipolar
Los datos ofrecen así la primera evidencia de que la actividad del sistema nervioso afecta la longevidad humana. Los investigadores concluyen que las estrategias que aumentan los niveles de REST y reducen la actividad neuronal excitatoria podrían usarse para influir en el envejecimiento.
«Un área de investigación futura y emocionante será determinar cómo estos hallazgos se relacionan con funciones cerebrales humanas de orden superior», añade Yankner.
El estudio podría además servir de modelo para el diseño de nuevas terapias para afecciones que involucran hiperactividad neuronal, como la enfermedad de Alzheimer y el trastorno bipolar. Los hallazgos plantean la posibilidad de que ciertos medicamentos, como los medicamentos que se dirigen a REST, o ciertos comportamientos, como la meditación, puedan extender la vida al modular