Una desconexión neuronal podría explicar la crueldad humana

La capacidad de cometer atrocidades comienza con la inhabilitación de una red de células cerebrales que nos permite empatizar con otros, sugiere un estudio

Los seres humanos a veces son capaces de cometer grandes atrocidades y actos horribles, prácticamente inconcebibles. ¿Por qué? Un estudio reciente realizado por investigadores de la Duke University y de la Princeton University, de Estados Unidos, sugiere que estos comportamientos podrían tener su origen en el fallo de una red neuronal implicada en la interacción social y que hace posible que reconozcamos a otras personas como “humanos”. Por Yaiza Martínez.

 

Red de neuronas. Imagen: gerard79. Fuente: stock.xchng.

Red de neuronas. Imagen: gerard79. Fuente: stock.xchng.
Los seres humanos a veces son capaces de cometer grandes atrocidades y actos horribles, prácticamente inconcebibles. ¿Por qué?

Un estudio reciente realizado por investigadores de la Duke University y de la Princeton University, de Estados Unidos, sugiere que la clave de estos comportamientos podría estar en el fallo de una red neuronal implicada en la interacción social y en el reconocimiento de otras personas como “humanos”.

Dicha red puede desconectarse ante los individuos que causan disgusto o rechazo, afirman los autores del estudio. Como consecuencia, la gente deshumaniza a otros individuos y olvida que éstos tienen pensamientos y sentimientos.

Según explica el director del estudio, el psicólogo Lasana Harris, en un comunicado de la Duke University: “Cuando nos encontramos con otra persona, normalmente deducimos algo sobre sus pensamientos. Pero, a veces, esta función cognitiva falla, lo que abre la posibilidad de que no percibamos al otro como completamente humano”.

Red neuronal y empatía

En los últimos años, la neurociencia social (que es el estudio simultáneo de dos cerebros en interrelación mutua) ha demostrado que, en el cerebro humano, normalmente se activa una red neuronal concreta cuando vemos imágenes de otras personas o reflexionamos acerca de lo que están pensando otros individuos.

Esta red ha sido identificada gracias a la tecnología IRM o de imagen por resonancia magnética, que permite, de manera no invasiva, registrar imágenes de la actividad cerebral.

Los científicos han sabido que esta red de conexiones neuronales está relacionada con la cognición social, facultad gracias a la cual podemos tener determinados pensamientos o sentimientos –como la empatía- al interactuar con otros individuos.

En la investigación de Harris, realizada en colaboración con Susan Fiske, una profesora de psicología de la Universidad de Princeton especializada en la formación de impresiones sobre los demás y en cómo afectan los prejuicios culturales a las relaciones humanas, participaron 119 estudiantes de la Universidad de Princeton, de una media de edad de 20 años. Todos ellos completaron una encuesta sobre juicios y toma de decisiones, a medida que iban viendo imágenes de personas.

Resultados obtenidos

Con esta encuesta, los científicos determinaron si los estudiantes presentaban respuestas emocionales esperables ante ciertas imágenes, como orgullo al ver a una estudiante de universidad o a un bombero americano; envidia al ver a una mujer de negocios y a un hombre rico; compasión, ante un hombre anciano y una mujer discapacitada o rechazo, al ver a una mujer sin hogar y a un hombre drogadicto.

Lasana Harris. Fuente: Duke Institute for Brain Sciences.

Lasana Harris. Fuente: Duke Institute for Brain Sciences.

Tras imaginar un día en la vida de estas personas, se pidió a los participantes que evaluaran sus potenciales características: su grado de calidez, de competencia, de responsabilidad hacia su propia situación, de control sobre su situación, de inteligencia, de autoconciencia, etc.

Por último, los estudiantes fueron sometidos a un escáner de IRM para registrar su actividad cerebral, al mismo tiempo que veían las imágenes.

Los resultados obtenidos demostraron lo siguiente: la red neuronal clave para la interacción social de los estudiantes no se activó ante las imágenes de drogadictos, personas sin hogar, inmigrantes y otras personas pobres.

Por otro lado, los científicos descubrieron que otras regiones cerebrales influían en la tendencia a deshumanizar a cierto tipo de personas. Dichas regiones fueron las relacionadas con el rechazo, la atención y el control cognitivo.

Es necesario ponerse en la piel de otros

Según Harris: “Estos resultados sugieren que la deshumanización de otras personas tiene raíces múltiples y es un fenómeno complejo. Habrá que hacer nuevas investigaciones para delimitar con mayor exactitud esta complejidad”.

Lo científicos afirman, por otra parte, que resulta muy sorprendente constatar cómo la gente atribuye fácilmente cognición social –vida interna o emociones- a animales y a coches, pero, en cambio, elude establecer contacto ocular con los mendigos sin hogar que se encuentra por la calle.

A este respecto, Fiske señala que “necesitamos pensar en la experiencia de otras personas, eso es lo que nos hace completamente humanos”. De lo contrario, fomentaremos una disfuncionalidad neuronal que favorece la “percepción deshumanizada” o la incapacidad de considerar la vida interior de los demás.

En una situación extrema, esta desconexión cerebral podría explicar, por ejemplo, cómo la propaganda contra los judíos en la Alemania nazi contribuyó a la tortura y el genocidio de millones de personas, afirman los investigadores.

Los resultados de esta investigación han aparecido detallados en el Journal of Psychology bajo el título «Dehumanized Perception: A Psychological Means to Facilitate Atrocities, Torture, and Genocide?” (La percepción deshumanizada: ¿Un instrumento psicológico para posibilitar atrocidades, tortura y genocidio?).

Estudios previos habían establecido ya relaciones entre el funcionamiento del cerebro y las capacidades sociales. Es el caso, por ejemplo, de una investigación sobre psicópatas realizada en 2010 por psicólogos de la Universidad de Vanderbilt, en Estados Unidos, en la que se constató que los cerebros de este tipo de individuos presentan una actividad mayor de lo normal en cierta área del cerebro relacionada con la sensación de recompensa o de placer.

Como consecuencia, los psicópatas buscan siempre su propio beneficio sin importarles los efectos de sus actos sobre otras personas o los peligros que puedan conllevar dichos actos

http://www.tendencias21.net/Una-desconexion-neuronal-podria-explicar-la-crueldad-humana_a9138.html?preaction=nl&id=1453142&idnl=103385&

5 comentarios en “Una desconexión neuronal podría explicar la crueldad humana

  1. vaya disparate…. seguramente dentro de poco impondran algo para controlarnos mejor…..

    sabes si los canibales tienen ese grupo de celulas o solo es un problema cultural….

    en una sociedad de competitividad, privilegios, egoismo, deshumanizacion, etc…. la verdad que nuestros politicos tendran atrofiadas esas celulas.

    1. Estimado manolo el del bombo:
      Los políticos pertenecen a otra raza, creo que ellos no tienen neuronas sinó porcentajes de beneficio.
      El cuerpo humano ha demostrado en repetidas ocasiones que puede ser manejado por agentes externos. Inducir sentimientos o deseos es ya posible.
      se puede conseguir incluso que funcione mal y satisfaga intereses de terceros.
      Sin embargo la crueldad humana no tiene su origen en el cuerpo. Es sólo una opción del ser consciente. Una opción que no conduce sino a la autodestrucción y al renacimiento.
      La crueldad está a merced del materialismo que nos aferra a este mundo. Es un dolor personal que se exterioriza de forma agresiva contra el otro. Es la ausencia de paz interior.
      Esa crueldad sólo se puede explicar por la falta de espiritualidad.
      Un saludo

  2. Querido maestroviejo, según Eduardo Punset, «Tus neuronas no saben quién eres, ni les importa», y si es un sistema eléctrico y falla, afecta a la mente, y quizás, solo quizás ¿ese cortocircuito podría hacer que la persona actúe de muchas formas no acostumbradas? ¿Vos decís que solo la falta de espiritualidad es responsable de la crueldad? ¿porqué decís que la crueldad no tiene origen en el cuerpo?

    1. Querida Marge:
      Quería diferenciar un comportamiento inducido de un comportamiento pretendido.
      Si tomas mucho café tu cuerpo reacciona ante la cafeína, o bebiendo alcohol. Esos son comportamientos inducidos por agentes externos.
      Un trauma puede afectar a esa desconexión neuronal, para mi eso sería un comportamiento inducido por agentes externos. Si consigues superar ese trauma podrás volver a la auténtica personalidad.
      Hemos visto aquí en el blog lo que es el ego, la suma de lo cultural, lo familiar. Un ambiente cultural y/o familiar puede condicionar también un comportamiento agresivo, logrando esa desconexión neuronal para mi seguiría siendo un comportamiento inducido.
      Yo creo que somos seres conscientes que están por encima del cerebro y del ego. Aunque estos nos ayuden a vivir esta realidad temporal y condicionen nuestro progreso y evolución al final de las vidas.
      Para mi la auténtica crueldad pretendida vendría directamente de ese ser consciente, producto de una evolución negativa que se aleja de lo espiritual. Esto hace que factores negativos como la agresividad, la violencia motivada por una frecuencia de vibración alta, estén presentes en ese ser.
      Ya sabes querida Marge que para mí todo el cuerpo incluido el cerebro no es sino un recipiente.
      De hecho cuando morimos el cerebro sigue funcionando durante un tiempo. Uñas, pelo, reflejos musculares….
      Un saludo

  3. Querido maestroviejo, clarito como el agua mineral. Muchas gracias. Ah, te mando un saludo, no un abrazo, porque aquí estamos en pleno veeeraaanooo, y tengo el envase transpirado, no, era broma. Un abrazo desde Argentina, y gracias otra vez por contestar, y dar tu opinión.

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