Conviene recordar que desde 1949, el Tíbet fue invadido por 35.000 soldados chinos que violaron, torturaron y asesinaron sistemáticamente a unos 1,2 millones de tibetanos, una quinta parte de la población del país. Desde entonces, más de 6000 monasterios han sido destruidos y miles de tibetanos han sido encarcelados. Según diferentes fuentes, se estima que hasta 260.000 personas murieron en prisiones y campos de trabajo entre 1950 y 1984.
A pesar de esta barbarie leo con estupor sobre la ultima vuelta de tuerca del gobierno de Xi Jinping. La noticia es del pasado 17 de junio. Viene de Radio Free Asia y fue enviada por Lhuboom para el Servicio Tibetano de la RFA y traducido por Dorjee Damdul.
Las autoridades chinas en el Tíbet han ordenado la destrucción de las banderas de oración en muchas partes de la región en uno de los ataques más directos de China hasta la fecha a los símbolos visibles de la cultura y la creencia religiosa tibetanas, según fuentes de la región.
La campaña, descrita como un programa de «reforma del comportamiento», comenzó en junio en la Prefectura Autónoma del Tíbet de Golog (en chino, Guoluo) de Qinghai y en el condado de Tengchen (Dingqing) en el municipio de Chamdo de la Región Autónoma del Tíbet.
«Los funcionarios del gobierno y la policía han convocado a la población local a reuniones, ordenándoles que participen en lo que llamaron una campaña de limpieza ambiental y un movimiento de reforma del comportamiento», dijo la fuente de RFA, hablando con la condición de mantener el anonimato.
«Dirigidos por la policía, los tibetanos locales están ahora quitando las banderas de oración en sus pueblos y en las cimas de las colinas», donde tradicionalmente se les cuelga en la creencia de que alejan el mal y traen buena suerte.
Ya sean viejas o nuevas, las banderas de oración que llevan mantras están siendo retiradas de sus lugares tradicionales, añadiendo que incluso los postes en los que se colgaban las banderas están siendo desmantelados.
«Este es un acto de absoluto desprecio y total falta de respeto por las costumbres y la fe de los tibetanos locales», añadiendo que teme que esta nueva campaña se extienda y fomente aún más restricciones a las costumbres y prácticas religiosas tradicionales.
«Las autoridades chinas en general siempre han prometido eliminar cualquier comportamiento tibetano que, según dicen, perjudicará la productividad de la gente y afectará negativamente a su sustento», dijo.
«Así pues, las autoridades se han propuesto ahora erradicar esta tradición tibetana de colgar banderas de oración en todas partes, ordenando a los funcionarios locales, a los jefes de los monasterios y a las autoridades pertinentes a nivel de distrito y de municipio que lleven a cabo la orden».
La campaña contra las banderas se produjo cuando el examen anual del Centro Tibetano para los Derechos Humanos y la Democracia determinó que las políticas chinas desgastan y destruyen sistemáticamente la identidad nacional y cultural de los tibetanos, con un uso cada vez mayor de la vigilancia y la supervisión en línea para reprimir la disidencia política, y reforzaron las restricciones al derecho de los niños tibetanos a recibir instrucción en su propio idioma.
A lo largo del año, las fuerzas policiales y los equipos de vigilancia chinos se desplazaron a monasterios y pueblos para vigilar a los residentes tibetanos en busca de signos de oposición al gobierno de China, dijo el centro con sede en Dharamsala, India, y añadió que «se desplegaron programas informáticos de reconocimiento facial y una cuidadosa vigilancia de los espacios digitales para suprimir las protestas políticas contra el aumento de las restricciones a los derechos civiles y políticos».
La paranoia del gobierno chino con todo los asuntos relacionados con el Tíbet , les lleva a ser el único país del mundo que considera que Su Santidad el XIV Dalai Lama es un terrorista y al criminal Massood Azhar, un líder espiritual!
Las recientes agresiones por parte del ejercito comunista chino en la frontera con el estado de Ladakh y Arundachal Pradesh en India con bajas mortales entre los guardias fronterizos indios ha llevado al primer Ministro tibetano en el exilio Dr Lobsang Sangay a lanzar un aviso en unas declaraciones exclusivas a CNN News 18: La reivindicación de soberanía de China sobre todo el Valle de Galwan en Ladakh oriental, una reivindicación que no había hecho directamente durante décadas, ha llevado al líder del gobierno tibetano en el exilio a emitir una terrible advertencia a la India: «aprende de lo que le pasó al Tíbet».
En una entrevista exclusiva para CNN-News18, Lobsang Sangay, Presidente de la Administración Central del Tíbet, explicó que las recientes acciones de Beijing en la línea de control real con la India pueden considerarse como la continuación de la «estrategia de los cinco dedos del Tíbet», tal como la estableció el padre fundador de la República Popular China, Mao Zedong.
«Cuando el Tíbet fue ocupado, Mao Zedong y otros líderes chinos dijeron: ‘El Tíbet es la palma que debemos ocupar, entonces iremos tras los cinco dedos’. El primer dedo es Ladakh. Los otros cuatro son Nepal, Bután, Sikkim y Arunachal Pradesh», dijo.
Tras estas agresiones chinas, a los tibetanos les ha surgido un aliado inesperado. Se ha presentado un proyecto de ley en el Congreso de los Estados Unidos para anular el control de China sobre el Tíbet y reconocerlo como país independiente. Presentado por el congresista Scott Perry, el proyecto de ley, H.R. 6948, tiene por objeto dar al Presidente de los Estados Unidos la autoridad para declarar el Tíbet como país independiente para «otros fines».
Para que se convierta en ley, el proyecto de ley tendrá que recibir una señal verde de la Cámara y el Senado antes de que el Presidente dé el sello final de aprobación. Anteriormente, el Senado de los EE.UU. también aprobó una resolución para bloquear a las empresas chinas para que no coticen en las bolsas de valores americanas.
La medida de los EE.UU. ha dado un nuevo rayo de esperanza a los tibetanos que se han sufrido terriblemente bajo la ocupación de China por casi siete décadas. Muchas personalidades de renombre del Tíbet se han dado a conocer en los medios sociales para agradecer a los americanos por dar un paso adelante en su libertad.
Esta nueva situación llega tras las transgresiones y repetidas invasiones de territorio fronterizo indio a través del Tíbet. La independencia del Tíbet de China es de interés para la India y para la seguridad del planeta ya que significaría que India tendría como vecino a un Tíbet pacifista a lugar de la China imperialista y beligerante que tienen ahora.
Las relaciones del gobierno de la India con el gobierno del Tíbet y tras la invasión con el Dalia Lama y su gobierna en el exilio asentado en Dharamsala ( India) han sido excelentes. Es por ello que Europa debería seguir el ejemplo de los Estados Unidos y plantarle cara al gigante chino.
La solución es el DIALAGO pero poco se puede esperar del único país del mundo que considera terrorista a un hombre de paz como el Dalai Lama y líder espiritual al clérigo criminal Massood Azhar!
Agradecimientos a Alan Cantos , presidente del Comité de Apoyo al Tíbet