«La vibración no miente» es una frase que se utiliza a menudo para referirse a la idea de que las vibraciones o las energías que emitimos a nuestro alrededor son un reflejo fiel de nuestros pensamientos, emociones y acciones.
Esta frase suele ser utilizada en el contexto de la ley de atracción, que dice que atraemos a nuestra vida aquello a lo que prestamos atención y en lo que enfocamos nuestra energía. Esta vibración puede ser detectada por otros a través de la intuición, y también puede ser medida por dispositivos científicos.
Es fácil notar cuando alguien tiene un buen corazón, ya que esto se manifiesta a través de su vibración energética. Aunque podemos tratar de ocultar nuestra verdadera esencia con nuestra apariencia, nuestra vibración siempre revela nuestras intenciones y emociones.
La teoría detrás de la «vibración no miente» es que cada pensamiento y emoción tiene una vibración única, y que esta vibración puede ser detectada por otros. Por ejemplo, si alguien está sintiendo miedo, su vibración energética será diferente a la de alguien que está sintiendo amor o alegría.
Atraemos a nuestra vida aquello a lo que prestamos atención y a lo que damos energía. Si estamos vibrando en una frecuencia alta y positiva, atraeremos cosas positivas a nuestra vida. Por otro lado, si estamos vibrando en una frecuencia baja y negativa, atraeremos cosas negativas.
Gracias a las vibraciones se puede detectar si alguien está siendo sincero o no. Si alguien está diciendo algo que no es verdad, su vibración energética puede delatarlo. De esta manera, podemos confiar en nuestra intuición y en nuestras propias percepciones para detectar si alguien está siendo sincero o no.
La vibración es la que da forma a nuestra belleza y bienestar, y las personas más hermosas son aquellas que nos hacen sentir bien con su presencia y emiten un aura de bondad y amor. Las relaciones y amistades se basan en gran medida en la sintonía de nuestras vibraciones energéticas, y aunque podemos enamorarnos de la apariencia de alguien, es su vibración la que realmente nos atrae y nos hace quedarnos.
La intuición nunca falla y nuestra vibración siempre revela quiénes somos realmente. Es ella la que nos une a otras personas o nos aleja de ellas, ya que aunque las apariencias pueden ser engañosas, la vibración jamás miente.
«El primer punto de contacto entre dos personas, no es la piel, es la energía».
Por Aleja Bama