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En Tercer Milenio no buscamos ser alarmistas, no es nuestra intención que la gente entre en pánico. Sin embargo, deseamos crear conciencia y que nos demos cuenta de lo que está sucediendo en nuestro planeta. Aquí les presentamos la investigación por parte de Marilu Carrillo, con los eventos catastróficos e inexplicables que se han presentado recientemente en nuestro planeta.
El Apocalipsis lo estan creando las clases dominantes con su desmesurado amor al dinero. Por dinero se hacen las mayores barbaridades imaginables y se antepone a cualquier cosa, persona o lugar. Este es el gran Dios del siglo XXI y el que va a acabar con el mundo si no ponemos remedio.
La vida es un ciclo eterno, un ir y venir a éste, tanta veces depreciado, pero añorado espacio temporal. Los seres humanos adoran el cuerpo físico y sus posibilidades, el cual hasta los ángeles envidian, lo cierto es que hacemos todo lo necesario por acabar con él. A través del alimento que consumimos, los medicamentos que ingerimos, la contaminación y la destrucción del hábitat planetario con desechos sólidos, líquidos y tóxicos que arrojamos a la atmósfera, las lagunas, ríos, lagos y mares. Poco a poco estamos cortando la rama donde todos estamos sentados y seguimos muertos de la risa, será por eso, de que el golpe avisa. De los fundamentalistas religiosos, ¡líbranos señor!, ellos a través de los siglos han demostrado y demuestran lo que son capaces de lo peor, con la sacro santa inquisición, las cruzadas, la intifada, la quema de brujas, el genocidio europeo en el nuevo mundo, el invasor con la cruz y la espada redujo en menos 100 años, de 100.000 millones de indígenas a 800.000 mil. Las guerras religiosas desatadas por todos los credos a nombre de su dios, han quemado, torturado, destripado, asesinado a millones de seres humanos inocentes. Para colmo ahora aparece a quien echarle la culpa de la destrucción del planeta que supuestamente tanto queremos pero que en realidad odiamos, una acusación sin derecho a réplica; son los famosos extraterrestres, los intraterrestres, los ultraterrestres, en toda su variedad; enanitos verdes, los grises, zoomórficos y no humanoides, los reptilianos, los grises bajos, los grises altos o blancos, los reptilianos, los draconianos, los sirianos de sirio b, los annunaki, los telosianos, los lyrianos, los de vega, los pleyadianos, los nórdicos rigelianos, los procyonos, los de tau ceti, los andromedianos, los sirianos de sirio a, los ummitas, los alfa centauri, los arcturianos, los procyones, son tantos y tan diversos que hasta les inventamos una confederación galáctica, pero todo es puro cuento, mitos urbanos, relatos de alucinados, cuentos chinos, cuentos de camino y pare de contar, hasta ahora estos seres solos se comunican con algunos elegidos telepáticamente, que en la mayoría de los casos montan tremendo negocio con donaciones, ventas de libros, conferencias, en fin unos estafadores de lo peor, recubiertos con el traje de los elegidos ven a todos sobre el hombro mientras acarician los billetes en sus bolsillos. La moda de ahora es echarle la culpa a las erupciones solares, a la alineación de los planetas, los meteoritos que se estrellaran contra la tierra y acabaran con todo, a las fechas cabalísticas, a los terremotos, a los tsunamis, a las inundaciones, en fin toda una saga de desastres sustentados en las profecías de Nostradamus, en el calendario maya, en los códigos bíblicos, en fin hay para todos los gustos. Pero los que realmente están acabando con este mundo y terminarán por destruirlo, es la contaminación irracional de absolutamente todo, de los señores de la guerra que venden millones de armas y municiones a dictadores, a la delincuencia, a los psicópatas y perturbados mentales en todos los continentes, a los traficantes y capos de drogas, al crimen organizado que acapara y se esconde en lo más oscuro del espíritu humano, al hambre crónica y mortal de los habitantes de los países africanos, asiáticos y latinoamericanos, al racismo arrogante que por el color de la piel desprecian y son capaces de eliminar a su vecino, a los neonazis que ya probaron de lo que son capaces de hacer pero quedaron con ganas, a la ambición desbordada de países y sus trasnacionales, a los gobernantes arrogantes de los países del supuesto primer mundo, que desprecian a los pueblos y son capaces de desatar un holocausto nuclear que acabe de una vez con la vida en este planeta y nos convierta en un astro sin vida que vague en la fría noche de la eternidad por los siglos de los siglos, amen.