Olivier de Schutter, relator especial de Naciones Unidas para el derecho a la alimentación, hace suyas las palabras de su antecesor en el cargo, Jean Ziegler: «Cuando un niño muere de hambre en el mundo, él o ella han sido asesinados». Con estas palabras, De Schutter quiere incidir en la responsabilidad que tienen los Gobiernos con la hambruna.
Este experto en derechos humanos visitó la semana pasada Palencia para participar en el Foro Europeo de Desarrollo Rural, organizado por la Agencia Española de Cooperación al Desarrollo (Aecid) y la UE. Mil millones de personas en el mundo pasan hambre. ¿Hay suficiente comida para terminar con la hambruna o habría que producir más? Ahora mismo hay comida suficiente.
La hambruna no es sólo una cuestión de que tengamos que producir más, sino de que esos productos estén bien repartidos y de que la gente tenga la capacidad adquisitiva para comprar los alimentos. Además, los ciudadanos de los países desarrollados tendrían que replantearse que ingieren demasiadas calorías.