Los inmunólogos están, al fin, hablando claro:
Se está contagiando población con pauta completa de vacunación. Esto va a generar una inmunidad híbrida. Sabemos que es más potente que la inmunidad por vacunación. Este dato nos hace prever que la población va a estar más inmunizada que en otras situaciones».
Quien lo explica es el presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), el Dr. Marcos López, nada sospechoso de «antivacunas», empleado de Janssen para el desarollo de su vacuna anti Covid y coordinador de una sociedad patrocinada por GlaxoSmithKline (GSK), uno de los grandes laboratorios fabricantes de vacunas (podéis verlo en su web)..
Por ello, si cabe se entiende menos la recomendación (que no obligación) de vacunar a jóvenes y niños.
Es un mantra acientífico que se repite sin cesar. Los datos oficiales lo corroboran.
La Consejería de Salud de Melilla ha publicado una hoja informativa que ofrece datos muy jugosos:
El análisis epidemiológico de la Covid-19 en la población entre 5 y 11 años de edad durante la quinta onda pandémica en España, mostró que el 99,7 % de los casos diagnosticados presentaron un cuadro leve siendo la mitad de ellos, incluso asintomáticos«.
Y hay más. «El 0,21% de los casos precisó hospitalización, y el 0,016% requirió ingreso en UCI pediátrica». De los trece casos que ingresaron en UCI más del 50% presentaba alguna enfermedad grave de base. Hubo un único fallecido.
¿De verdad tiene sentido vacunar a niños con semejantes cifras de afección y letalidad? El Gobierno melillense continúa:
El papel transmisor de la población infantil en la infección por SARS-CoV-2 parece ser menos importante comparado con el papel desempeñado por los adultos. Los estudios de transmisibilidad en centros educativos en países de nuestro entorno, muestran que se están produciendo pocos brotes en estos centros y que los casos-índice suelen ser adultos, sobre todo no vacunados.
El 50% de los brotes que se han producido han tenido menos de 5 casos. En España, el impacto en la actividad educativa de los casos y brotes en el ámbito escolar ha sido bajo durante el curso escolar 2021-2022; las aulas en funcionamiento, que no han tenido que ser puestas en cuarentena, han oscilado entre el 99,9% y 99,7%».
Lo paradójico es que desde Salud de Melilla escriban:
La vacunación en la población infantil disminuiría la carga de enfermedad en este colectivo y puede disminuir la transmisión en el entorno familiar, en los centros educativos y en la comunidad, contribuyendo a la protección de las poblaciones más vulnerables».
Pero, ¿no hemos quedado en que los niños contagian menos y que el problema en los centros educativos es casi inexistente? También sabemos que los vacunados pueden contagiarse y también transmitir la infección, luego que el niño esté vacunado no quiere decir que la abuela esté «a salvo».
Resulta increíble que las vacunas Covid-19 no eviten ni ingresos ni estancias en UCI como demuestran una y otra vez los datos. Vamos, que es un poco lotería esa protección; a unos protege y a otros no, y ni se sabe ni se estudia el porqué.
Y con el paso de los meses decae la inmunidad en general y es como si nada. Hay que ponerse entonces una dosis de refuerzo y así ¿hasta cuándo? No se sabe.
En fin, las paradojas de una pandemia que parece que va llegando a su fin.
http://www.migueljara.com/2022/01/28/el-mantra-acientifico-de-la-vacunacion-covid-infantil-con-datos-oficiales/