Esta historia es para ponerse en situación. Tú tan tranquil@ en el hospital esperando a que el anestesista de turno te duerma poco a poco para operarte y mientras estás sedada, ‘este personaje’ abusa sexualmente de ti. Pues bien, esto ha ocurrido en Canadá donde un malvado señor de 65 años se ponía las botas en el hospital.
George Doodnaught aprovechaba que sus víctimas estaban sedadas- aunque conscientes- para cometer semejante atrocidad. Un total de 21 mujeres fueron agredidas sexualmente, mientras no podían hacer nada debido a la anestesia.
Las víctimas- de entre 25 y 75 años- explicaron que el médico las besó, acarició y agredió, según explicó la BBC. El anestesista llevaba más de dos décadas en el Hospital General North York, donde tuvieron lugar todos los ataques menos uno.
El anestesista ha sido condenado a diez años de prisión. Y con el abogado que tiene, raro que no le hayan caído más. Ojo a lo que se aferra su defensa. Su argumento ha sido el siguiente: “Los sedantes han provocado que las víctimas soñasen con que habían sido asaltadas sexualmente”, dijo. Además, ha adelantado que planean apelar la condena. Ya está tardando…