No necesita ni sabiduría ni poderes, aspira a la felicidad, esta felicidad que siente como una dilatación y que sólo puede encontrar en el calor, es decir en el amor. Es ahí, en el amor, donde el corazón se anima, se vivifica. He aquí porqué busca este calor por todas partes, cerca de todos los seres, mientras que el frío lo mata.
Puedes proponer al corazón todas las riquezas, todos los poderes e incluso todos los secretos del universo, pero él te dirá: » No, no es esto lo que necesito, dame amor, quiero ser amado, ¡pero sobre todo quiero amar!» Entonces, sabe que es con el amor que obtendrás la realización de lo que deseas, porque este amor despertará en tu corazón y alimentará todas las semillas divinas.
Omraam Mikhaël Aïvanhov.
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