La cuerda se ha roto de tanto tirar y Podemos llegará herido y dividido a su congreso fundacional. A cuatro días del encuentro, el partido se fracturó ayer en dos bloques enfrentados por el modelo de organización en un ambiente más tenso que el de un mero debate de ideas.
El proyecto diseñado por Pablo Iglesias ha chocado con la opinión de tres de sus cuatro compañeros de escaño en Bruselas, que se han desmarcado por completo del funcionamiento interno que se quiere dar a Podemos. Pese a los últimos intentos de negociar, al final no ha habido acuerdo con esta otra vía, encabezada por Pablo Echeniquey Teresa Rodríguez -más la incorporación ayer de Lola Sánchez-. Por eso, los tres eurodiputados seguirán adelante con su modelo alternativo y lo enfrentarán al de Iglesias este fin de semana en una asamblea estatal ante las bases, que tendrán después la última palabra en votación.
Tania González dejó ayer el grupo crítico y Lola Sánchez se sumó para defender ‘el ADN de Podemos’
La tensión de fondo radica en lo queÍñigo Errejón -del equipo de Iglesias- denominó ayer «diferencias políticas relevantes», y que no son otra cosa que una distinta concepción de cómo se debe ejercer el control de Podemos en el futuro. Mientras la otra vía -denominada oficialmente Sumando Podemos– apuesta por una dirección colegiada con tres portavoces y un sistema de candidaturas individuales para una suerte de comité federal -incluso con un porcentaje de elegidos de forma aleatoria entre las bases-, la apuesta de Iglesias propone la figura de un único líder, llamado secretario general, y un sistema de listas abiertas para el mencionado comité. Además, hay otra diferencia sustancial. Los primeros quieren que la ejecutiva que toma decisiones diarias sea elegida directamente por todos los militantes, mientras que Iglesias prefiere proponer sus nombres por ser un mero «equipo técnico».
El pasado fin de semana, como publicó este periódico, la otra vía unió fuerzas consensuando con los grupos interesados un único documento con el fin de ganar fuerza y negociar después con Iglesias una transacción. Al final se apuntó una treintena. Pero por mucho que invocaron la unidad y el pacto, la fusión ha sido imposible.
«No era la lógica en la que queríamos trabajar. La democracia no consiste en estar todos de acuerdo», aseguró ayer Errejón a Europa Press, para añadir que al existir diferentes posturas respecto a la organización de Podemos, lo lógico, a su juicio, es que los simpatizantes decidan entre las diferentes propuestas.
Tania González, Pablo Iglesias y Carlos Jiménez Villarejo. | BERNARDO DÍAZ
Pese a las reticencias de Iglesias, sí que ha habido movimientos de posiciones en estos días. La eurodiputada Tania González se apeó ayer de la otra vía y se unió al líder de Podemos después de que éste aceptara incorporar algunos de sus planteamientos. Sin embargo, la mayoría del grupo que ambos encabezaban –Podemos Participar Más-, como Diego Pacheco, seguirán adelante. «Con su modelo, Podemos podría ser el partido con más secretarios generales de España. Entiendo que el 15-M no se sienta cómodo con estructuras tan tradicionales», dijo Pacheco a este diario, tras recalcar que «pocas cosas» de las suyas se han añadido. «No había suficiente voluntad».
Por su parte, Tania González ofreció una visión completamente diferente. Manifestó que Iglesias ha recogido aportaciones «representativas» y «satisfactorias» de su grupo y algunas «importantes» de otros durante las últimas semanas, por lo que se sentía cómoda con su modelo organizativo. Asimismo, minimizó el debate interno. «No creo que haya tensión», dijo, y recalcó que el debate interno es parte de la «diversidad» de Podemos.
Pero si el paso atrás de Tania González se sentía como un mazazo,Lola Sánchez daba un paso al frente escenificando la división entre los eurodiputados. En una carta abierta, recalcó que la otra vía «refleja el espíritu con el que nació Podemos» y «puntos» que constituyen su «ADN», como «la autonomía e identidad propia de los círculos», «la portavocía plural» o el rol de los movimientos sociales. «Aún hay tiempo para hablar», dijo en una llamada al consenso.
Otro de los críticos es Víctor García, autor de uno de los modelos organizativos más valorados en internet y ahora voz autorizada de laotra vía. En su opinión, el modelo de los fundadores de Podemos hará que «todo el aparato sea monolítico, ya que se elegirá mediante sistemas de voto mayoritarios y por listas, de tal manera que estar en la lista de Pablo [Iglesias] te dará el pase». «Son sistemas que conducen a la fractura en los que el ganador se lo lleva todo», destacó. «Por el contrario, nuestra propuesta propone un consejo ciudadano plural y diverso en los que las minorías estén correctamente representadas y en los que todos los miembros de Podemos tengan posibilidades de participar».
La propuesta de Pablo Iglesias
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- Portavocía. El partido tiene un líder fuerte y reconocible por la ciudadanía al que se llama «secretario general». Es la principal figura.
- Consejo Ciudadano. Es el máximo órgano entre congresos y recuerda al Comité Federal del PSOE. Consta de 81 miembros, 17 de los cuales serán los líderes autonómicos. El resto de miembros se elige por un sistema de listas abiertas sólo corregibles por circunstancias de género. Tiene importantes atribuciones, como hacer el programa electoral, dirigir los procesos de primarias o decidir las posibles alianzas electorales o postelectorales. No obstante, esas decisiones tendrán que ser después avaladas por los afiliados en asamblea.
- Consejo de Coordinación. Es la ejecutiva del día a día y consta de 10 a 15 miembros. El secretario general propone sus nombres -por considerarlo un «equipo técnico»- y sólo deberán ser refrendados por el Consejo Ciudadano. El conjunto de los afiliados no vota.
El documento de la otra vía
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- Portavocía. Además de una diferencia terminológica -se rechaza de plano un «secretario general»-, se apuesta abiertamente por una dirección colegiada donde no haya un único portavoz del partido, sino tres. Cada uno tendría funciones ejecutivas en distintas áreas.
- Consejo Ciudadano. Se elige por candidaturas individuales, sin que los miembros estén ‘apadrinados’ en una lista determinada. Se vota bajo el método corrector VUT (Voto Único Transferible) que permite ordenar por preferencia a los candidatos. Además, minimiza el «voto útil» porque los sufragios se suman a la siguiente opción si el primer candidato no resulta elegido. Sus defensores aseguran que así se garantiza el respeto a las minorías. Además, un 25% de los miembros del Consejo se elige por sorteo entre una bolsa de candidatos con el propósito de hacerlo menos controlado.
- Consejo de Coordinación. Votados por los afiliados entre los miembros delConsejo Ciudadano
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En todos los conglomerados humanos la tendencia de el de al lado es un culazo diciendo quítate tú que me pongo yo.
A veces ni siquiera hace falta que algunos hablen, a menudo se les conocen hasta por los andares.
¿Y éstos son la esperanza de cambio? Aún no han cazado el oso y ya andan peleándose por las pieles.
Huelen la posibilidad de acceder al pastel y todos quieren asegurarse un pedazo grande, salvo los idealistas, que también los hay, que serán los primeros derrotados.
Por lo que se ha visto, me parece que la opcion del otro lado es mejor que concentrar casi todo en una solo persona llamada secretario general, posicion mas dictatorial.
Totalmente de acuerdo D.N.
Saludos.
Al parecer Pablo quiere ser el mandamás y el que elige a la dirección ejecutiva y el que decide quién si y quién no ( si vas en su lista estás dentro y si no, estás fuera )……….
Suena a personalismo narcisista, ególatra y dictatorial. O directamente a más de lo mismo. Para simplificar se puede decir que Pablo quiere ser lo que fué Felipe González al PSOE y lo que fué Aznar al PP.
Nada nuevo bajo el sol.
Si Jose nada nuevo bajo el sol.
Saludos
LA DEMOCRACIA OCCIDENTAL ES UNA ILUSIÓN, LOS QUE REALMENTE MANDAN, SON «LOS MERCADOS»… (ES DECIR: LA FED)
http://nisir.wordpress.com/2012/12/05/jose-ortega-habla-en-la-cadena-ser-sobre-el-nuevo-orden-mundial/
Saludos
Tanto dar vueltas para ir a lo mismo