El grupo terrorista Estado Islámico reivindicó la explosión de un autobús que tuvo lugar el martes en Túnez, informó la agencia Reuters, citando un comunicado del EI.
Por su parte, Estados Unidos expresó su disposición a respaldar la investigación del atentado, comunicó el secretario de prensa del Consejo Nacional de Seguridad de EEUU, Ned Price.»Estamos dispuestos a prestar apoyo a las autoridades de Túnez en investigar este ataque», declaró el portavoz, agregando que el país árabe también recibirá apoyo en el ámbito de seguridad, economía y administración.
El martes, un autobús con guardias presidenciales explotó en el centro de la capital tunecina. El ataque se saldó con 13 muertos.
Inicialmente se sospechó que la bomba fue colocada en el motor del vehículo, sin embargo, más tarde una fuente de las fuerzas de seguridad informó que la explosión fue causada por un terrorista suicida desde fuera.
El país introdujo el estado de emergencia por 30 días.
Por su parte, el Ministerio del Interior de Túnez informó que el autobús explotado traía diez kilos de sustancias explosivas.
«En el transcurso del ataque se utilizaba una mochila y un cinturón de suicida que contenía diez kilogramos de sustancias explosivas», dice el comunicado, publicado en la página de Facebook del ministerio.
El mensaje también confirma que la explosión dejó 13 muertos y agrega que «es imposible identificar la 13a víctima por huellas dactilares»