Imágenes vía satélite de alta resolución han revelado la existencia de una monumental estructura enterrada en las arenas del desierto de Jordania, a apenas 800 metros de Petra, la capital de los nabateos excavada en la roca, según un estudio publicado en el Boletín de las Escuelas Americanas de Investigación Oriental y recogido por National Geographic. Los arqueólogos creen que podría tener más de 2.150 años de antigüedad, según la datación de los restos de cerámica recogidos en el lugar.
Aún no se sabe a ciencia cierta para qué era utilizada la enorme plataforma. «Que yo sepa, no tenemos nada parecido a esto en Petra», señala el arqueólogo Christopher Tuttle, director ejecutivo del Consejo de Centros Estadounidenses de Investigación en el Exterior (CAORC) que ha trabajado en Petra durante dos décadas y es co-autor del trabajo junto con Sarah Parcak, una experta de la Universidad de Alabama en Birmingham que se describe como experta en «arqueología desde el espacio».
Tuttle había notado que en el lugar, curiosamente cerca del centro de la ciudad, había «algo», pero los lados de la estructura parecían paredes de terrazas comunes y nadie les había prestado mucha atención. Mediante el empleo de Google Earth, WorldView-1 y WorldView-2 y la ayuda de drones que han fotografiado la zona, los arqueólogos han descubierto este monumento, casi tan largo como una piscina olímpica y el doble de ancho. Se cree que fue una plataforma ceremonial que, por los restos cerámicos recogidos en el lugar, tendría más de 2.150 años.
El hallazgo fue una sorpresa para los investigadores ya que Petra es uno de los sitios arqueológicos más conocidos y estudiados del mundo. La plataforma hallada muestra, sin embargo, que todavía hay secretos ocultos en los 264 kilómetros cuadrados del parque arqueológico de Petra.
El Tesoro de Petra es la primera construcción de cierta entidad que encuentra el viajero cuando emerge del Siq, el desfiladero de 1,5 km que hay que recorrer para llegar a la ciudad escondida de Petra, en Jordania. Descubierta por el explorador Johann Burckhardt en 1812, se cree que la capital de la tribu árabe de los nabateos fue fundada en el siglo II antes de Cristo y abandonada al final del periodo bizantino, en el siglo VII.
Cientos de miles de turistas visitan cada año esta ciudad considerada por la Unesco como «uno de los bienes culturales más valiosos del patrimonio cultural del hombre».