Cuando nos roban el móvil tenemos algunas opciones para evitar que el ladrón pueda reutilizarlo. Por ejemplo, a través de nuestra cuenta de Google o Apple podemos bloquear el móvil por completo, de manera que el ladrón sólo pueda usarlo si lo resetea y lo deja de fábrica en el caso de Android, quedando nuestros datos a salvo. El bloqueo por IMEI es la última opción, e impide a cualquier persona usar ese móvil para llamar por teléfono o usar tarifa de datos, aunque no en todos los países. ¿Por qué no funciona a nivel mundial?
El bloqueo por IMEI ayuda, pero no impide que se usen móviles robados en otros países del mundo
En España, si contactamos a nuestro operador, éste permitirá bloquear el móvil por IMEI para que no funcione con ningún operador de España, además de invalidar la tarjeta SIM. Gracias a ello, evitamos sorpresas en la factura donde delincuentes puedan realizar llamadas a números 902 controlados por ellos y que luego sea el operador el que te pase a ti la factura. Además de llamar al operador, es importante denunciar el robo a la Policía por si consiguen localizar el terminal.
El bloqueo por IMEI nos permite comprobar si un móvil es robado. Cuando nos roban un móvil en España, el móvil suele tardar poco en salir de nuestro país si no consiguen engañarnos para que le demos acceso a nuestra cuenta mediante phishing, y suele acabar en países del norte de África, como es el caso de Marruecos.
En el caso de los iPhone, es mucho más complicado poder usar los robados. Cada uno va asociado a un Apple ID, y hasta que no se usar el usuario y contraseña real, los dispositivos sólo podrán ser vendidos para aprovechar sus piezas.
Y es que no todos los países forman parte de los acuerdos a nivel mundial. La GSMA creó el estándar de telefonía móvil en 1982, y en 2015 ya se superaron los 10.000 millones de líneas en todo el mundo. Tantas líneas requerían una base de datos común, y por ello se elaboró la GSMA IMEI Database. Gracias a ella, todos los operadores que así lo quieran pueden llevar un control de los móviles que están dentro de la lista negra por haber sido robados incluso en países distintos a los que operan.
Cada vez que alguien realiza una llamada con el móvil, se usa la tarjeta SIM para verificar que el móvil puede operar en el país, además de que tiene saldo. En el caso de no poder, la llamada no llega a realizarse y queda bloqueada. El principal problema es que no todos los operadores del mundo utilizan esa base de datos para comprobar los móviles robados.
Más de cien países no implementan el bloqueo por IMEI a nivel mundial porque beneficia a los operadores
Por ejemplo, un móvil robado en España no va a poder funcionar en Estados Unidos o en otros países de la Unión Europea de nuestro entorno como Francia o Alemania, ya que los operadores de estos países usan el sistema de bloqueo internacional de la GSMA. Estados Unidos tiene la CTIA, donde todos los operadores del país cotejan las bases de datos con la de la GSMA.
Sin embargo, hay más de cien países cuyos operadores no tienen implementados las listas negras, haciendo que un móvil robado en Estados Unidos funcione perfectamente en un país de América Latina, mientras que uno robado en la Unión Europea pueda funcionar bien en países de África.
Son los propios operadores de cada país los que tienen que implementar la conexión de su red con la base de datos a nivel mundial. Y muchos de estos operadores de países en vías de desarrollo no tienen interés en implementar esas bases de datos, ya que con un móvil robado vendido a bajo precio están obteniendo un nuevo usuario en sus redes que de otra manera no podrían estar monetizando. Por ello, ni actualmente implementan el listado de móviles bloqueados, ni tiene pinta de que lo vayan a hacer en el futuro porque no tienen ninguna obligación y además les estaría perjudicando a su negocio.
A este hecho hay que sumarle que hay otros tantos delincuentes que modifican el IMEI de móviles robados, y le ponen el de otros móviles que sí pueden acceder a redes en las que estarían bloqueados de haber mantenido el IMEI. Gracias a ello, un móvil robado en España puede volver a ser utilizado aquí, aunque hacerlo es ilegal y lleva asociada incluso penas de cárcel.
Por tanto, el robo de móviles es algo que va a seguir creciendo en todo el mundo, ya que son dispositivos muy codiciados. Si se bloquean por IMEI, se pueden enviar a otro país para que funcionen. En el caso de que eso no salga rentable, también es posible venderlo por piezas en el país donde ha sido robado, aunque a un precio algo inferior. Por tanto, os recomendamos que siempre tengáis algún tipo de bloqueo o cifrado en vuestro móvil para evitar que os lo puedan robar. También debéis hacer copias de seguridad periódicas de vuestros datos, ya sea en la nube o de manera manual copiando la información a vuestro ordenador. El 77% de los usuarios usa el móvil con fines bancarios o financieros, pero sólo el 25% tiene algún tipo de protección en el móvil.