El gobierno de Madrid, España, autoriza a “La Policía de las Emisiones” controlar y medir el nivel de las emisiones contaminantes de los vehículos diésel, gasolina y GLP e imponer multas de hasta 3.000 euros a los conductores superen los límites establecidos, de modo de cumplir con las metas de disminución de emisiones de carbono a la atmósfera según lo reclamado por Naciones Unidas en su Agenda 2030 para el “combate del Cambio Climático”.
Los Agentes de Movilidad del municipio cuentan con tres estaciones móviles, allí se realiza el control mediante equipos de medición que se colocan en el tubo de escape de los vehículos inspeccionados y mide, en 5 segundos, sus emisiones de monóxido de carbono (CO), dióxido de carbono (CO2), hidrocarburos (HC), hexano equivalente (C6H14) y oxígeno (02).
En caso de que las emisiones se encuentren por encima de los límites establecidos, el equipo de medición entregará al conductor un documento impreso en el que aparecerán los valores y contará con un mes de plazo para pasar de manera obligatoria la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) con la que deberá circular por las calles, de no tenerlo podrá ser sancionado con multas de entre 750 y 3.000 euros.
Cabe remarcar que en el artículo 31 de la Ordenanza de Calidad del Aire y Sostenibilidad (OCAS) del Ayuntamiento de Madrid se estipula que los Agentes podrán inmovilizar el vehículo inspeccionado “cuando se superen los máximos permitidos de emisión de gases y humos, en particular habiéndose activado las medidas de actuación en episodios de contaminación y mientras no sean subsanadas las causas del incumplimiento”.
Para el vicepresidente de AEMA-ITV, José Luis Acebes, “esta nueva medida para examinar las emisiones del tráfico rodado, además de continuar protegiendo el medioambiente, también ayudará a reducir las muertes prematuras debido a la contaminación atmosférica”.
Según los más recientes datos facilitados por el Archivo de Vehículos de la Comunidad de Madrid a AEMA-ITV, correspondientes al mes de noviembre del 2023, un 8,95% de los vehículos inspeccionados en las ITV madrileñas presentaron defectos graves en el capítulo de emisiones contaminantes para la atmósfera.
Cabe recordar que esta ciudad ya cuenta con distintas “áreas ZBE” o zona de bajas emisiones. Automóviles nuevos con etiqueta C, pese a cumplir la exigente norma Euro 6d, también verán restringida su circulación por algunas zonas céntricas, por motivos ambientales.