Sus creadores dicen que genera hasta un 50% más de energía con el mismo coste. Se puede colocar en cualquier lugar alto, como una terraza o un tejado. Y aunque obtiene electricidad a partir de la fuerza del viento, no tiene partes móviles. Es un molino de viento sin aspas. O, mejor dicho, un aerogenerador sin palas. Y es que su aspecto recuerda más al de una máquina de aire acondicionado que a una turbina eólica clásica.
Después de la fuerza animal, la energía del viento fue una de las primeras fuentes externas que usaron los seres humanos para llegar más allá de lo que permitían sus brazos y piernas. Para mover barcos en el mar, para bombear agua o para moler cereales. En este sentido, el molino es uno de los ingenios humanos más antiguos. Y su forma poco ha evolucionado. Es más, las turbinas eólicas que encontramos con cada vez más frecuencia en distintos paisajes emplean también las clásicas aspas o palas que se mueven por acción del viento.
Sin embargo, desde hace unos años, investigadores de todo el mundo intentan mejorar un invento casi tan viejo como las piedras pero que nos ha sido de gran utilidad durante siglos. Precisamente, ayudándose de todos los conocimientos que hemos acumulado en cuestión de aerodinámica y de cómo la fuerza del viento se puede convertir en electricidad sin necesidad de elementos móviles que sufran desgasto o rotura con el paso del tiempo. Y, en consecuencia, con un menor impacto ambiental. Seguir leyendo Este molino de viento no tiene aspas ni gira, pero produce electricidad y es revolucionario →