La teoría de la conspiración electrónica se dice ,es una variante de las teorías modernas de conspiración del Nuevo Orden Mundial.

La teoría consiste en la creencia de que un grupo secreto ha intentado durante siglos alcanzar el dominio total del mundo, incluso si el resultado del diseño fuera la destrucción del mismo.

Según esta teoría, el dominio mundial se ha planificado desde la antigüedad y consta de las siguientes fases:

1. La sustitución de la moneda preciosa basada en metal por papel moneda. Este proceso se inició en el Renacimiento, con el inicio de la utilización de billetes que les quita a las personas de un bien tangible (por ejemplo, piezas de plata o de oro) por el papel, de un medio más virtual, pero cómodo.

2. La aparición del dinero virtual, con las tarjetas de crédito: el dinero se acerca al estado puramente virtual. El dinero ya no es un objeto tangible de papel o a base de metal, sino más bien una serie de números grabados en bandas magnéticas.

3. La proliferación de Internet y comercio electrónico: las tarjetas de crédito ya no son necesarias para comprar o vender productos y servicios solo se necesita una computadora conectada a Internet.

4. La concentración de la banca en todo el mundo en pocas manos, por medio de continuas fusiones bancarias internacionales.

5. La puesta en práctica en todo el mundo de una tarjeta de identidad electrónica.

6. El gran apagón mundial. Un tremendo desastre se producirá cuando, después de un gran apagón eléctrico a escala planetaria, los datos de todas las cuentas electrónicas se borrarán al mismo tiempo.

Después de este evento, el caos y la pobreza de forma inmediata se producirá en todo el planeta y la civilización volverá a una forma primitiva de esclavitud para sobrevivir.

Este es el último objetivo de esta «organización secreta», que ha pasado siglos en dirigir este proceso.

El apagón en todo el mundo será precedido por apagones parciales que sólo serían pruebas y «señales» para comunicar que las diferentes fases del proceso se están cumpliendo.

Un ejemplo de estos apagones parciales serían los que se han producido casi simultáneamente en diferentes partes del mundo, a principios del siglo 21, estos se han dado en los Estados Unidos, Canadá, Australia y el Reino Unido.