Hoy voy a hablar sobre un mal que acecha a un porcentaje cada vez más importante de nuestra sociedad: El Autismo. De hecho es algo que está afectando directamente a nuestro futuro como especie, puesto que sus principales víctimas son nuestros propios hijos

Paul Eugen Bleuler

Un poco de historia
Los primeros casos de autismo se reportan a principios del siglo XX, cuando el psiquiatra suizo Eugene Bleulerutilizó ese término en 1912 para referirse al comportamiento extraño que presentaban algunos niños de su consulta.
La cuestión es que un siglo después, nuestra moderna ciencia no tiene la menor idea de porqué cada vez una mayor cantidad de niños padecen esa enfermedad, que ha experimentado un aumento del 700% solo en España. Es más, se puede afirmar sin miedo a exagerar que han pasado más de 100 años y a día de hoy no se sabe qué es lo que la causa. Algo no se está haciendo bien, ¿No crees?
A pesar de todo, si lees un poco sobre el asunto, investigas y -sobre todo- tienes una mente abierta, encontrarás la respuesta a esas preguntas. He aquí algunas pistas.

La primera pista es que existen niños en España y otros países que han superado esa enfermedad, pese a que la mayoría de los psiquiatras siguen afirmando que no hay cura posible. Pero, ¿Cómo lo han hecho?
Bien, llegados a este punto, cabría hacer una distinción entre los niños que han nacido autistas, cuya evolución es impredecible y difícil, y los que llevando una vida normal han comenzado poco a poco a mostrar síntomas de deterioro en su comportamiento de forma inexplicable, puesto que hasta determinada fecha parecían niños felices. Estos niños, tras muchas pruebas y angustias -por parte de los padres- suelen ser diagnosticados con un Trastorno Generalizado del Desarrollo, es decir, autismo.

La solución empleada por los padres de estos niños que, finalmente se han recuperado, ha sido biológica. A ver si me explico; si el problema está en el mal funcionamiento del cerebro porque “esté dañado”, la solución propuesta por nuestros médicos consiste en ponerte en manos de un psicólogo primero y luego en un psiquiatra, que proporcionará drogas a tu hijo a fin de que tenga un comportamiento “adecuado”. Es decir, delegar la salud en otros, como por otra parte ya nos han acostumbrado a hacer.

Otros padres, sin embargo, llegaron a la conclusión de que la causa del repentino cambio -”repentino” es pocos meses, en términos de vida humana- de comportamiento de sus hijos, podría tener un origen biológico. No es que su cerebro no estuviera sano, si no que algo en el organismo de los niños estaba causando ese funcionamiento anómalo.

Y es que los síntomas del autismo suelen aparecer entre los primeros 15 y los 18 meses de vida, ¡casualmente cuando se aplican las primeras vacunas!, que casualidad, ¿Verdad? Es curioso que las primeras vacunas comenzaran a aplicarse también a principios de siglo, coincidiendo con los primeros diagnósticos de autismo. Que conste que no estoy diciendo que las vacunas sean la causa de la mayoría de casos de autismo, simplemente hago notar estas tremendas casualidades que nadie parece querer ver.

Es posible que si o que no sean la causa directa, aunque seguramente sean uno de los cofactores más importantes debido a los patógenos que se inyectan en los cuerpos de los niños, como el escualeno y/o el mercurio, pudiendo llegar a acumularse en los cuerpos de un organismo debilitado e incapaz de expulsar las toxinas acumuladas tanto antes, como después de nacer.
Pero ¿Cómo voy a rebatir yo, un pobre ignorante, la opinión de la gran mayoría de neurólogos que afirman que la relación entre vacunas/alimentación/autismo es inexistente?

Pues lo voy a hacer con la lógica en una mano y los datos en la otra, puesto que aún quedan en el mundo personas honestas que no piensan únicamente en lucrarse a costa de los demás:

Dr. James Adams

– James Adams: Este científico publicó en junio de 2011 un trabajo titulado Estado nutricional y metabólico de niños con autismo comparados con niños neurotípicos y su asociación con la severidad del autismo. En ese estudio se confirma que la dieta juega un papel fundamental en los niños autistas, hasta el punto de ser lo que marca la diferencia entre una recuperación completa o un empeoramiento de su estado. Las palabras de los investigadores en la conclusión final del estudio fueron contundentes: Nuestra hipótesis es que el apoyo a estos problemas nutricionales y metabólicos aumentando la ingesta de nutrientes puede reducir los síntomas y las comorbilidades asociadas al autismo, disfunciones que pueden estar relacionadas con esta etiología.
– DAN!: ¿Porqué surgen movimientos como DAN! (Defeat Autism Now)? (Traducido,Venzamos al Autismo Ahora!) El movimiento DAN! no lo inició un grupo de hippies melenudos, si no que es promovido por profesionales médicos que afirman que el autismo se puede curar con una dieta adecuada, eliminando para empezar, la ingesta de alimentos que el niño autista no puede digerir correctamente, añadiendo suplementos y otros tratamientos biológicos a fin de favorecer la eliminación de toxinas.

Dr. Bernard Rimland

– Dr. Bernard Rimland: Investigador durante 50 años del autismo y padre de un niño autista al que calificaron de INCURABLE. Niño que hoy día es completamente normal. Rimland fue el impulsor en Dallas (EEUU) de la primera conferencia DAN!, allá por 1995, y el que diez años después -en 2005- puso en evidencia al congreso de los EEUU con su discurso claro y directo. A pesar de las evidencias, la gran industria farmacéutica continúa negando la posibilidad de tratar el autismo desde la nutrición.
– Los Dres. Sid Baker y Jon Pangborn afirman: Estamos en total desacuerdo con las principales corrientes médicas que afirman que con insistencia que el autismo es incurable, puesto que tenemos tratamientos biomédicos efectivos.
– AVA (Asociación para Vencer el Autismo): Esta asociación española relacionada con el movimiento DAN!, dispone de acceso a suficiente información sobre el método para lograr los requeridos cambios dietéticos y la desintoxicación que posibilite mejora o cura de un niño autista. Su presidenta, Ana Medina Torres, está dispuesta a proporcionar información a quien la necesite.

Karyn Seroussi

– Karyn Seroussi: Esta madre de un niño autista es la autora del libro “Desentrañar el misterio del autismo y el PPD” y autora asimismo del artículo titulado “Nosotros curamos el autismo de nuestro hijo“, donde nos cuenta que tras percatarse de la relación entre la alergia de la leche y las infecciones crónicas de oído de su hijo, probó a retirársela, junto a otros alimentos que eran la base de la alimentación, como los cereales y la pasta. “Lo que pasó entonces fue como un milagro -cuenta- dejó de gritar, de pasar tanto tiempo realizando acciones repetitivas y hacia el final de la primera semana tiraba de mi mano cuando quería bajar las escaleras. Por primera vez en meses permitió que su hermanita le cogiera de las manos para cantarle una canción“. A los tres años su autismo había desaparecido por completo.
– Lisa Lerwis: Fundadora junto a la ya mencionada Karin Seroussi de ANDI (Red Autista en pro de la Intervención Dietética, de sus siglas en inglés).
– Autism Research Institute: Entidad que proporciona multitud de información sobre la alimentación más adecuada para un niño autista y un lugar donde los padres pueden compartir datos y experiencias sobre la evolución de sus hijos.

Dra. Rosella Mazzuka

– Dra. Rosella Mazzuka: “Aunque la sociedad norteamericana ANDI establezca unas pautas básicas a seguir, a los niños les hacemos diversos análisis, puesto que las analíticas pueden variar mucho de un niño a otro. Se estudia pués, caso por caso, teniendo en cuenta el nivel de absorción de nutrientes o la presencia de metalesa pesados en el organismo“.
– María: Esta madre de un niño curado de autismo siguiendo las pautas de DAN!, cuenta “me he encontrado con la lamentable esperiencia de intentar explicar el tratamiento llevado a cabo con mi hijo, al neuropediatra infantil que le trataba en Tenerife y al neurólogo que lo diagnosticó -que por cierto, certifica su recuperación- recibiendo a cambio la burla y la indiferencia, diciendo sin siquiera escucharme, que la dieta sin gluten y sin caseína es una soberana estupidez. Me dijeron que seguramente han tenido mucho que ver las terapias psicopedadógicas, terapias a las que mi hijo dejó de ir hace mucho tiempo. El comportamiento de estos médicos es una vergüenza y lo malo es que esto está ocurriendo en los consultorios pediátricos de toda España“. Esperpéntico, pienso yo.

COMPLEMENTARIO
Estas técnicas se han mostrado tremendamente eficaces para combatir la proliferación por virus, hongos y bacterias en los organismos de los niños, así como para mejorar y recuperar espectacularmente la salud de un niño afectado de autismo:

– Biomagnetismo: Aparte de una correcta alimentación con la eliminación del gluten, los lácteos y el azúcar, esta asombrosa técnica desarrollada por el Dr. Goiz, permite ayudar en gran manera a la recuperación de los niños, puesto que elimina de una manera eficaz la infestación por la bacteria Cándida Albicans, bacteria que un 60% de nosotros portamos sin siquiera ser conscientes de que padecemos candidiasis. También detecta de manera precisa que organismos patógenos pueden estar afectando al pequeño.
– Método Tomatis
– Método Padovan
– Terapia Cranosacral
– Homeopatía
– MMS: Eficaz es también el protocolo con MMS de la Dra. naturópata Kerri Rivera.
– Cámara Hiperbárica: Como la que hay en el Hospital de la Caridad en Cartagena (Murcia), que permite una mejor oxigenación cerebral de los niños. Los testimonios sobre ello son muy positivos.
– Técnica de Eliminación de Alergias: Desarrollada por el Dr. Devi Nambudripad, se presenta como otra opción natural al tratamiento del autismo.

CONCLUSIÓN
¿Que los psiquiatras o los neurólogos afirman que todo esto son “paparruchas”? Reto a cualquiera de ellos a que me presente una lista de niños a los que hallan proporcionado alguna mejora de cualquier tipo aparte de drogarlos. Que se lo digan sino al cada vez más creciente número de padres que han conseguido recuperar a sus hijos.

RELACIONADO:

– Documento en PDF: PROTOCOLO DAN en ESPAÑOL

– Comiendo sin Gluten y sin Caseína.

– Artículo en Discovery DSalud: “¿Es la mala salud intestinal la causa del autismo y otras patologías?“

http://genteconconciencia.es/blog/?p=5754