En cierta manera siempre estamos confiando en exceso de lo que otras personas descubren y esto es normal. Por ejemplo, no todos podemos saber de física molecular, así que tenemos que fiarnos de alguien que lo investigue por nosotros. Nos rendimos sin saberlo a la realidad de aquellos que nos informan sobre ella hasta que llega a un punto en que su realidad se convierte la nuestra. Lo malo es que en esas realidades de las que nos informan, nosotros no jugamos ningún papel. Este agobio no para de darnos caza. Lo mismo ocurre con profesores, políticos, presidentes, filósofos y gurús que nos informan de lo que hay en el camino un poco más adelante.Aunque todo esto es valioso por si mismo, nuestro propio sentido de lo que debe ser real para nosotros es lo que debe ser importante. Al final, somos nosotros, las únicas autoridades de nuestra pequeña o gran realidad. Tenemos el sí o el no final para todo aquello que nos quieran presentar como verdad. La belleza de evolucionar es que nada es verdad del todo y que nunca lo ha sido. Todo lo que ha sido sostenido como verdad en el pasado ya ha quedado atrás. Nadie te recuerda esto.Por esto mismo, antes de aceptar cualquier verdad de donde sea, parémonos un poco a ver su pequeñísima trascendencia y decidamos qué parte de ella nos va a afectar o qué parte de ella vamos a aceptar. Tú eres el que forma tu realidad. Formar una bella realidad es hoy en día un reto en medio de tanta gente informándonos de sus fantásticas realidades, realidades donde uno queda inmediatamente relegado.Crees todavía que ese profesor, ese político, esa novia-o, ese gurú, lo va a hacer por ti? Usa tu mente, construye una realidad digna para ti. Kiel
Fuente: http://www.universalsuccessformula.com/
http://armonicosdeconciencia.blogspot.com.es/2012/04/la-ultima-autoridad-eres-tu.html
Muy acertado. Últimamente, y no es una crítica, salen filósofos, guías espirituales etc…pero creo que somos nosotr@s mism@s los que debemos decidir sin dejarnos influir, desde nuestra consciencia. Si nos apuntamos al carro de tod@s terminaremos con una empanada mental monumental sin sacar nada en limpio. Tenemosque actuar respetándonos y respetando a l@s demás por supuesto, pero con nuestra personalidad enteramente libre. Es bueno escuchar a tod@s pero con criterio.