El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, anunció el miércoles una moderación casi total del bloqueo comercial que pesa sobre Cuba desde enero de 1961 e hizo un mea culpa porque, según señaló, «las décadas de aislamiento de Cuba por parte de los EEUU no han conseguido el perdurable objetivo de promover el surgimiento de una Cuba estable, próspera y democrática«.
«No podemos seguir haciendo lo mismo y esperar obtener un resultado diferente«, manifestó Obama desde laCasa Blanca, luego de que se conociera el intercambio de prisioneros entre ambos países. «Empujar a Cuba al abismo no beneficia a Estados Unidos ni al pueblo cubano«, agregó el mandatario.
El presidente norteamericano calificó como «históricas» las medidas anunciadas por su gobierno tendientes a «confraternizar y empoderar al pueblo cubano«. «Hoy, Estados Unidos está tomando medidas históricas para trazar un nuevo rumbo en nuestras relaciones con Cuba y para confraternizar y empoderar al pueblo cubano», dijo Obama.
El acuerdo entre ambos países para reanudar sus relaciones diplomáticas podría abrir a las empresas estadounidenses las puertas del mercado cubano, que hoy en día tienen vedado.
Grandes empresas como el fabricante automovilístico General Motors, el gigante agrícola Cargill o la cadena de venta de muebles Ethan Allen Interiors celebraron el paso dado para restaurar los vínculos con la isla, según informó el prestigioso diario The Wall Street Journal.
Entre las medidas económicas divulgadas por la Casa Blanca, figura la expansión de ventas y exportaciones comerciales de ciertos bienes y servicios desde Estados Unidos, con el objetivo de apoyar «al naciente sector privado cubano«.
«CUBA NECESITA TODO LO QUE FABRICAMOS EN ESTADOS UNIDOS»
Además aumentará el nivel de envío de dinero permitido de u$s500 a u$s2.000 por trimestre para las remesas que reciben los ciudadanos cubanos desde Estados Unidos. Las instituciones norteamericanas podrán abrir cuentas en instituciones bancarias cubanas para facilitar el procesamiento de transacciones financieras autorizadas.
«Cuba necesita todo lo que fabricamos en Estados Unidos«, afirmó el director de Asuntos Gubernamentales del fabricante de maquinaria pesada Caterpillar, Bill Lane, a The Wall Street Journal.
«Hemos estado pidiendo una nueva política hacia Cuba durante quince años«, agregó Lane, quien reflexionó que su empresa espera poder abrir pronto un concesionario en Cuba.
Sin embargo, las compañías estadounidenses no han prometido, de momento, inversiones en el país caribeño, pese a las oportunidades que se presentan en campos como la agricultura, las telecomunicaciones, el turismo o los recursos naturales.
«HEMOS ESTADO PIDIENDO UNA NUEVA POLÍTICA HACIA CUBA DURANTE QUINCE AÑOS»
El mayor obstáculo para establecer unas relaciones comerciales plenas entre ambos países continúa siendo el embargo decretado por Estados Unidos sobre la isla, una barrera que sólo puede levantar el Congreso estadounidense.
En la década del 50, los intercambios comerciales bilaterales experimentaron un boom, pero esa tendencia se frenó en la siguiente década, cuando se impuso el embargo tras la llegada de Fidel Castro al poder.
11 millones de consumidores
Desde el embargo, las empresas estadounidenses no han tenido acceso a 11 millones de consumidores cubanos que viven a menos de 200 kilómetros de las costas de la Florida.
La economía cubana sigue férreamente controlada por el Gobierno, los consumidores aún tienen un poder adquisitivo relativamente bajo y el mercado cuenta con la participación de multinacionales de países que no rompieron sus lazos con el régimen de Fidel Castro, al que sucedió en 2006 su hermano Raúl.
En tanto, el portal cubano Martí Noticias señala que esos factores podrían todavía ser un obstáculo para la normalización de la relación comercial cubano-estadounidense, incluso si el Congreso decidiese enterrar el embargo, aunque compañías del sector turístico ansían la llegada de ese momento. «Tan pronto sea posible, estaremos allí (en Cuba)», afirmó el director ejecutivo de la cadena hotelera Choice Hotels International, Stephen Joyce.
Por su parte, el presidente Barack Obama afirmó el miércoles que las empresas de su país «no deberían ponerse en desventaja y que un aumento en el comercio es bueno para los estadounidenses y para los cubanos».
Obama advirtió que el proceso llevará tiempo: «No espero que los cambios que estoy anunciando provoquen una transformación de la sociedad cubana de la noche a la mañana«.
«UN AUMENTO EN EL COMERCIO ES BUENO PARA LOS ESTADOUNIDENSES Y PARA LOS CUBANOS»
Las agencias de viajes están esperanzadas en duplicar su oferta
Con esperanza recibieron algunas agencias de viaje en el sur de la Florida el anuncio del presidente Barack Obama de ampliar los viajes de los ciudadanos estadounidenses a Cuba y autorizar el uso de las tarjetas de crédito en la isla.
Mavi Yaneth es encargada de la agencia Pro Cuba, una compañía que realiza envíos y vende boletos aéreos hacia la isla: «Esto significaría mucho más volumen, porque a los estadounidense les llama la atención conocer Cuba, especialmente los que residen en la parte norte del país, que siempre se interesan por el tema Cuba, además es una isla que tiene muchos sitios para conocer», expresó en declaraciones recogidas por Diario Las Américas.
En la actualidad, aquellos que quieren viajar a Cuba deben adquirir el boleto en un precio que oscila entre 500 y 560 dólares. De acuerdo con Yaneth, una flexibilización en las políticas de viajes hacia la isla permitiría un descenso en el costo del billete.
«Eso sería ideal, actualmente una persona que desee pasar Navidad en Cuba debe pagar aproximadamente 550 dólares por un vuelo de 35 minutos, algo absurdo. Fuera de temporada puede costar entre 300 y 350, además se incorporarían nuevas líneas que viajarían a la isla», concluyó.
http://www.infobae.com/2014/12/19/1616138-las-estrategias-empresas-los-eeuu-explotar-el-historico-acercamiento-cuba