– Cuando te enfermes, en lugar de odiar ese mal, considéralo tu maestro.
– No mires con disimulo, mira fijamente.
– No olvides a tus muertos, pero dales un sitio limitado, que les impida invadir toda tu vida.
– En el lugar donde habites, consagra siempre un sitio a lo sagrado.
– Termina siempre lo que comenzaste.
– Haz lo que estás haciendo lo mejor posible.
– No te encadenes a nada que a la larga te destruya.
– Desarrolla tu generosidad sin testigos.
– Ordena lo que has desordenado.
– Aprende a recibir, agradece cada don.
– No mientas ni robes, si lo haces te mientes y robas a ti mismo.
– Haz planes de trabajo y cúmplelos.
– No ocupes demasiado espacio.
– Si no la tienes, imita la fe.
– No te dejes impresionar por personalidades fuertes.
– No te apropies de nada ni de nadie.
– Reparte equitativamente.
– No seduzcas.
– Come y duerme lo estrictamente necesario.
– No hables de tus problemas personales.
– No establezcas amistades inútiles.
– No te vendas.
– Respeta los contratos que has firmado.
– Sé puntual.
– No envidies los bienes o los éxitos del prójimo.
– Nunca amenaces.
– Realiza tus promesas.
– En una discusión ponte en el lugar del otro.
– Admite que alguien te supere.
– Vence tus miedos, cada uno de ellos es un deseo que se camufla.
– Ayuda al otro a ayudarse a sí mismo.
– Transforma tu orgullo en dignidad.
– Transforma tu cólera en creatividad.
– Transforma tu avaricia en respeto por la belleza.
– Transforma tu odio en caridad.
– No te alabes ni te insultes.
– Trata lo que no te pertenece como si te perteneciera.
– No te quejes.
– Desarrolla tu imaginación.
– Paga los servicios que te dan.
– No contraigas deudas, adquiere y paga enseguida.
– Si ofendes a alguien, pídele perdón.
– Si lo has ofendido públicamente, excúsate en público.
– No conserves objetos inútiles.
– No rindas cuentas a nadie, sé tu propio juez.
– Nunca te definas por lo que posees.
– Nunca hables de ti sin concederte la posibilidad de cambiar.
– Acepta que nada es tuyo.
– Si decides trabajar para los otros, hazlo con placer.
– Si dudas entre hacer y no hacer, arriésgate y haz.
– Vive de un dinero ganado por ti mismo.
– No te jactes de aventuras amorosas.
-Obtén para repartir.
-Ayuda a tu prójimo sin hacerlo dependiente.
-Si estás meditando y llega un diablo, pon ese diablo a meditar…
Alejandro Jodorowsky